Capítulo
3
—Ese
pequeño súka —Yunho dijo con desprecio mientras el cuello de un
guardia se quebraba en su puño. Jaejoong estaba a punto de ser
ejecutado —voluntariamente—por un número insignificante de
asesinatos.
En
momentos simples. El compañero del guardia disparo salvajemente; las
balas conectaron sobre la piel de Yunho, pero él apenas las notó.
Él
se había alimentado ayer y estaba muy fuerte por ello. Al menos, su
cuerpo lo estaba. Su mente, sin embargo…
Con
un alarido, se abalanzó hacia delante acuchillando con sus garras la
garganta del tirador. Cuando la sangre salpicó sobre su cara, los
colmillos de Yunho se afilaron por la carne, sus pensamientos en
blanco. La locura. Lamiéndole los talones.
Incluso
ahora, con tanto en juego. Demasiadas víctimas, demasiados
recuerdos. Siempre pagando peaje.
¡No,
Yunho, enfócate en el final del juego! Llega a él, salva a tu pareja.
Sus
enemigos le habían impedido llegar a él antes. Si es demasiado
tarde...
Cargó
hacia adelante a través de corredores sin luz, viendo fácilmente en
la oscuridad, pero el lugar era un laberinto de pasillos y
habitaciones minúsculas.
—¡Blyad!
—No podía captar su esencia sobre el olor a amoníaco. Otro
pasillo apareció a la vista, más cámaras etiquetadas: espacios
familiares, salas de visitas, celdas.
No
hay tiempo. Le había advertido a Jaejoong que no dañara a su
pareja. Sin embargo, él opto por ser condenado, dirigiendo al
abogado de oficio a no presentar ningún recurso, a no negociar
ninguna apelación.
Después
de vivir miles de años, Yunho muy rara vez se sorprendía, sus
acciones habían sorprendido a la mierda fuera de él. Correr hacia una
lluvia de balas era una cosa, incansablemente planear un suicidio
durante años otra completamente diferente.
No
podía decidir si él estaba mortalmente deficiente con premeditación
o demente consumado. Optó por ambas cosas.
En
cualquier caso, estaba demostrando ser una espina en su costado,
costándole de incalculables formas. Yunho era conocido en todo el
Lore por recoger deudas de sangre de los inmortales en situaciones
desesperadas, negociando con ellos para hacer tratos con el diablo. A
pesar de que estaba orgulloso de su contabilidad rebosante de
entradas, atesorándolas, él ya había quemado dos debido a
Jaejoong.
Había
obligado a un oráculo en deuda a vigilar su encarcelamiento. Y
solamente unos minutos antes, un deudor tecnópata lo había
acompañado aquí para cortar toda la energía de la instalación,
incluyendo los generadores de respaldo, dejándola sin luz, sin
cámaras.
Sólo
en una total confusión.
Y
ese era el consenso del plan de hoy de Yunho: el tecnópata cortaba
la energía, mientras el vampiro masacraba en su camino hacia el
joven.
Ridículamente
simple para un estratega nacido.
Como
si se sacrificasen por el plan, dos guardias lo interceptaron en el
pasillo, iluminando con sus linternas sus ojos de color rojo. Durante
su silencio de asombro, Yunho tuvo tiempo para anticipar sus
reacciones.
El
más grande a la derecha dispara primero, tres disparos antes de que
se dé cuenta que le arranque la columna vertebral. El de la
izquierda tartamudeará una respuesta a mis preguntas, aunque sabrá
que morirá inmediatamente después.
—¡Las
manos donde podamos verlas!
Yunho
atacó. Primer disparo, segundo disparo, tercer disparo.—Un grito torturado.
El gran cuerpo de uno sin espina dorsal cayó al piso.
Con
una mano, Yunho tiró del largo hueso. Con la otra, levantó al
guardia restante por la garganta.
—¿Cuál
es el camino hacia la cámara de ejecución?
Yunho
disminuyo su apretón lo suficiente para que el hombre rechinara
hacia fuera,
—D—derecho,
entonces... luego el segundo pasillo a la izquierda. Todo el camino
hasta el final. Pero, p—por favor- Chasquido. En el momento en que
el cuerpo del guardia se derrumbó, Yunho ya estaba en el segundo
pasillo a la izquierda.
Él
había puesto a Jaejoong en su mente, se había asegurado que
estuviera relativamente a salvo. Después de todo, él no se
preocupaba por su mente, sólo por su cuerpo, el templo que albergaba
a su Novio.
Mi
compañero. Que significaba todo para él. Y era un ser glorioso,
sediento de sangre él era...
¿Ren
había sentido la ejecución? ¿Luchando desesperadamente por
levantarse, para protegerse?
Sus
garras negras se clavaron en sus manos hasta que la sangre fluyó.
¡Enfócate carajo! ¡Enfócate!
A
medida que se adentraba más en el edificio, Yunho luchó para
distanciar sus pensamientos de su reciente encarcelamiento. La razón
por la que llego tarde a la ejecución de mi Novio.
Semanas
atrás, cuando él supo de esta fecha, había estado a punto de
rescatar a Ren. Entonces, él había sido capturado por la Orden, un
ejército mortal.
Había
escapado de ellos... pero ¿a tiempo?
Los
haces de más linternas brillaron adelante. Tres guardias
antidisturbios escoltaban a un puñado de civiles.
—¿Hay
alguien ahí? —Un guardia exigió.
Yunho
previó cortar una andanada de sangre y gritos a través del grupo.
¡No, enfócate!
A pesar del placer, sería egoísta.
Para
ahorrar tiempo, Yunho se teletransportó más allá de ellos,
desapareciendo y reapareciendo en un instante.
Cuando
llegó a la sala de observación, se teletransportó a su interior.
Dos
hombres jóvenes justo irrumpían por la puerta de la cámara de
ejecución contigua para vigilarla, buscando con Maglites (Marca de
linternas) y rifles de asalto.
Entonces,
por primera vez en cinco años, la mirada de Yunho cayó sobre
Jaejoong. La última vez que lo contempló, él estaba sobre la
nieve, sus ojos inusualmente negros lo miraron con un miedo
encantador.
Ahora
él estaba sujeto, vestido con un uniforme de color naranja lúgubre.
Su cabello de color castaño estaba recogido con severidad de su rostro.
Una
vez más, estaba aterrorizado, sus ojos se lanzaban a ciegas en la
oscuridad, pero él no sintió ninguna simpatía, sólo odio.
¡Todo
esto era obra suya! Con la aprobación de Jaejoong, las agujas habían
sido hundidas en el interior de sus dos brazos—Un líquido
transparente ya fluía por cada tubo.
Sintió
como si su corazón fuera a explotar. ¿Es demasiado tarde?
Con
un rugido, se teletransportó al interior, lanzó a los dos hombres lejos,
arrojándolos de cabeza contra la pared opuesta.
—¿Quién
está ahí? —Jaejoong gritó cuando él puso las manos
temblorosas sobre sus brazos delicados para enhebrar las agujas de
sus venas. —¿Qué está pasando? ¡No puedo ver! Se inclinó para
oler el líquido, casi hundiéndose a sus rodillas con el alivio.
Solución salina. No había olor a sustancias químicas, simplemente
agua salada.
Para
estar seguro, cortó la línea con una garra y goteo el líquido
sobre su lengua.
A
salvo Pero si hubieran sido segundos después...
Mientras
arrancaba libres los electrodos que cubrían a Jaejoong, pensó, —Has
sido malo pequeño mortal.
Aspiro
un aliento. Entonces él gritó: —¡Detente, bastardo! ¡Déjame
ser!
Una
vez que él corto a través de sus ataduras, lo sujetó con una mano
alrededor de la muñeca y tiró de él a sus pies.
Antes
de que Yunho se teletransportara de nuevo a la seguridad de su casa,
él le prometió: —Ahora, Jaejoong, tendrás que pagar.
Cuando
la tierra reapareció de repente debajo de él, Jae se precipitó
hacia delante. El sabía que aquel monstruo tenía la culpa, podría
reconocer la voz de Yunho en cualquier parte. Ese timbre profundo,
acentuado lo había atormentado en sus sueños.
Algo
como náuseas se apoderaron de él, cuando se dio cuenta que ya no
estaba en la cárcel. De algún modo lo había transportado a una
habitación de lujo, a algún tipo de mansión. Justo cuando él
recuperaba el equilibrio sintió que su cuerpo se levantaba del
suelo. —¡Ah! Detente, detente…
—¡Te
lo advertí, mortal! —El demonio gritó cuando lo arrojó lejos de
él.
Con
un grito ahogado, aterrizó de lado sobre un sofá a la mitad del
cuarto.
¡Levántate!
Mareo... ¡Jae, Mantenlo a la vista! Después de un movimiento para
despejar su cabeza, se encaramó a sus pies. El demonio iba y venía
delante de él, desapareciendo y reapareciendo mientras paseaba.
Él
era más grande de lo que recordaba, y esta vez parecía aún más
cruel. Tenía los puños cerrados, los tendones apretados en el
cuello. Sus iris brillaban rojos, venas con sangre se bifurcaban a lo
largo de la parte blanca de sus ojos.
Su
cara estaba salpicada de sangre, su cabello castaño teñido con
ella.
Una
vez más estaba vestido todo de negro, desde su gabardina hasta sus
botas. Agujeros de balas plagaban su camisa.
¡Esto
no puede estar pasando! ¿Robado del corredor de la muerte en
una prisión de máxima seguridad? Por él...
—¡Prometí
castigarte! —Balanceo su largo brazo hacia un lado, golpeando una
columna de mármol.
Trozos
de ello aterrizaron en la alfombra afelpada a sus pies, el edificio
entero pareció sacudirse. Su fuerza era monstruosa, al igual que
todo lo relacionado con él.
—Desobedeciste
bajo tu propio riesgo.
Debería
estar encogido ante él. En cambio, sentía una rabia abrasadora
hirviendo dentro de él. Jae había pensado que por fin sería libre,
que al final había derrotado a Ren. Había estado a dos minutos de
la muerte, listo para ello. Pero este demonio lo había frustrado una
vez más.
Él
ya le había quitado su libertad, asegurándose que pasara la mitad
de una década en una diminuta, celda maloliente. Cinco años
desesperado.
Al
recordar esos años, se encontró gritando, —¿Qué quieres de mí?
¿Qué?
—Por el rabillo del ojo vio a un florero, agarrándolo rápidamente.
—¿Por qué demonios no me puedes dejar en paz? —El arrojo la
pieza pesada —al golpearlo en el pecho se hizo añicos por el
impacto.
Como
si él lo hubiera estrellado contra una pared de ladrillos. Aún
mientras lo veía con incredulidad, encontró un pesado candelabro a
su camino agarrándolo. A dos minutos. Tan condenadamente cerca. Lo
lanzó por encima de su cabeza.
Él...
se desmaterializo, y voló en su forma nebulosa.
Jae
dio un grito de furia. Otro candelabro salió volando, un
pisapapeles, una lámpara.
Él
simplemente esquivó los proyectiles.
¡Esto
no puede estar pasando! Jae estaba sin aliento, desesperado por
hacerle daño, por castigarlo. Mil ochocientos veinte días de
estaciones afuera, sin nieve o flores, sin amigos ni
familia. Su hermanito no lo recordaba. Mientras que Sukkie había
estado creciendo constantemente hacia la madurez sin él en su vida,
la existencia de Jae se había estancado, interrumpida sólo por los
episodios de maldad.
Ya
no se sentía como una... persona.
No
soy una persona, soy el preso *8793347 en el Centro Correccional de
Seúl. Soy el anfitrión de Ren. A causa de él.
La
mirada de Jae se posó sobre una espada en una horquilla de
exhibición. El saltó por el arma, sacándola de su envoltura
ornamental. El resplandor del metal se reflejo en sus ojos. En ese
instante, llegó la claridad. Jae sabía lo que tenía que hacer.
Agarrando
la empuñadura con ambas manos, se volvió hacia él. —¡Te voy a
destripar, demonio!— Echó hacia atrás sus labios para que él
pudiera ver sus horripilantes colmillos, y luego chasqueo dos dedos
hacia Jae. Vamos, entonces...
Sus
ojos se agrandaron y él cargó, con la espada a punto de hundirse en
su pecho.
En
el último momento —la giró sobre sí mismo.
—¡No!,
—Gritó Yunho. Entonces de algún modo estaba entre él y la punta de
la espada, acuñada contra su cuerpo. La hoja se deslizó más abajo
hacia atrás hasta que se encontró con el hueso.
Se
quedo sin aliento, sintiendo que sus músculos se tensaban en su
contra, sintiendo su ira en aumento. El rojo de su iris sangraba
sobre la parte blanca de sus ojos por completo. Desnudó los
colmillos hacia Jae. —Esto se convierte en la segunda vez que me
has desafiado, Sùka. Has cometido un error para mal.
Con
un golpe de muñeca, lo envió volando hasta el piso. Aturdido.
Tendido sobre su espalda. Lágrimas histéricas lo amenazaban.
Jae
lo oyó quitarse la espada del cuerpo, luego desecharla. No lloraré
delante de él. No me rendiré a su perra.
Para
darse valor, recordó los años que paso mirando a las paredes de los
bloques de cemento. Contando los bloques, las líneas de las
boquillas, viendo los patrones y las formas. Lo había llamado el
Canal de bloques de cemento.
Sólo
bloques, todos los días. Ninguna interrupción. Jamás.
Apretando
los dientes, se retorció hacia un lado, trabajando para levantarse.
Su cabello se había soltado, derramándose sobre su cara. El empujó
el bloqueo de sus ojos.
—Mantente
abajo, —ordenó, alzándose sobre Jae. Él era un demonio, un
animal, todavía tenía sangre salpicada sobre su cara. ¿A cuántos
había asesinado el día de hoy?
—Regresa
de nuevo al infierno, imbécil. —Luego escupió en sus botas.
-Súka
: Perra en Ruso.
-Blyad:
Puta en Ruso.
Nota: Ren está dentro del cuerpo de Jae, a quién Yunho ve es a Jae con el alma de Ren. ¿se entiende? es que en varios comentarios me han puesto que no les gusta Ren para Yunho y la verdad es que Yunho no ve al Ren que conocemos, es el cuerpo de Jae el que él ve.
si me lo imaginaba que era Jae al que Yunho veía pero que estaba poseído por Ren pero en que momento paso eso
ResponderBorrarpobre de Jae que no lo puede dejar ser feliz por que tiene a ese otro ser dentro pero por que Yunho no lo puede sacar de Jae o tiene que conseguir otro cuerpo para que el espíritu o esencia de ese Ren no se pierda o que es que es lo que no comprendo por que se aferra a Jae por ese y no simple mente se lo quita de adentro y libera a Jae y así no lastimara a su novio bueno creo que con los capítulos por venir comprenderé mejor
Gracias por el capitulo hasta pronto bye
OMG! Jaejoong sufre mucho, y no solo eso, la ira que siente es inmensa. Ha perdido mucho, amigos, familia, hogar, su hermanito no lo reconoce .... Pfffff cualquiera odiaria todo esto, yo en lugar de Jamas perdonaria a Yunho, ni aunque fuese mi pareja y estee re bueno grrrr ..... Entendi eso lo de ren, el esta dentro de Jae, jijiji.... Una ultima pregunta, en el primer cap se dice que ren y yunho estuvieron juntos, eso quiere decir?...... Y fue con el cuerpo de Jae xD !?..... Gracias Gaby!!!!! .... Muero por saber que pasara. Yunho me cae chinche y ren ni se diga.
ResponderBorrarNo, Jae es virgen, como Jae y como Ren xD
BorrarHay nooooo Yunho va a ser cruel con Jae??, no quiero que lo lastime, me gusto mucho la imagen de Yunho todo ensangrentado ja ja ja, me pregunto como sacaran a Ren de Jae, gracias por el cap cada vez esta mas interesante
ResponderBorrarYo recien puedo comentar gabicita .
ResponderBorrarRen odiosooo edta metido en el cuerpo d jae. Yo www Quisiera q la primera vez d jae fuera con yunho y esiendo jae al 100% en cuerpo y alma *.*
mi Dios... Yunho está muy enfadado y si sigue dándole esos sacudones a Jae lo va desarmar al pobre
ResponderBorrarme encanta el coraje de Jae.será un muy buen contrincante para este Yunho desquiciado
gracias por la actu
Me encanta Jae que no se amedrenta ante Yunho, al contrario se le pone al tu x tu, sin importarle el que sea vampiro y el poder que tiene...
ResponderBorrarGracias
Eso quiere decir que Yunho quiere aJae porque Ren esta en su cuerpo.
ResponderBorrarEso tambien quiere decir que la persona que quiere Yunho es Ren.
OwO que mal va a pasar Jae,Ya no tiene derecho ni de su cuerpo o que....
Pobre Jaejoong a perdido todo y el quiere librarse pero tambien quiere que su familia no sea dañada ahora le tiene un odio a Yunho porque no lo deja en paz realmente se esta poniendo muy interesante quiero saber que va a pasar ...sobre lo de Ren si entendí el esta dentro del cuerpo de Jae asi que al que ve Yunho es a Jaejoong entonces cuando Ren sale solo lo que cambia de Jaejoong es su carácter ...next
ResponderBorrarwaaaaaaaaaa Pobre Jae.... Con todo lo que le paso como no iba a cargar con una ira tremenda por Yunho.... Cada vez se pone mas y mas interesante...
ResponderBorrarVoy a seguir leyendo~
Oh!! No puedo creer el sufrimiento de Jae! Encerrado tantos años! y cuendo por fin cree que sera libre el fustrado, de nuevo, por Yunho!
ResponderBorrarCuanta furia por parte de ambos.....
Yunho saca lo peor de jae...en cierta forna ambos .....muero por leer el castigo de yunhoxD
ResponderBorrarAishhhh ese Yunho debe ser mas amable, Jaejoong no quiere nada de eso para él solo es una marioneta usado por Ren, debe sentirse muy mal por no poder decidir sobre su vida
ResponderBorrarEntiendo eso de Ren en el cuerpo de Jae , lo que no entiendo es, si realmente Ren es el compañero de Yunho en el cuerpo de jaejooong o si yunho sintio que Ren es su compañero solo porque esta en el cuerpo de jaejoong (y en realidad al que sintio y es su compañero fue a jaejoong dormido dentro de su propio cuerpo, no se si me explico) y cuando fue que se conocieron Ren y Yunho?.
ResponderBorrarSupongo que todo lo sabre conforme avance la historia
Gracias