lunes, 9 de marzo de 2015

Subasta De Esclavos (Adaptación) Capítulo 5




Capítulo 5

Cuando abrió los ojos, Yunho pensó que su cabeza iba a explotar. Sabía que algo había cambiado, pero no podía imaginar que. Entonces sintió movimiento cerca de él. La respiración se le paró al ver a Jaejoong acunado contra su pecho, el pequeño hombre de espaldas a él. Estaban tan pegados el uno al otro que Yunho podía sentir cada exhalación que tomaba Jaejoong.

Yunho apartó con cuidado los rizos rubio-blancos de la cara de Jaejoong. No entendía por qué Jaejoong estaba ahí con él. Especialmente considerando las cosas que le había
hecho al humano, pero la pequeña sonrisa en los labios de Jaejoong demostraba que no estaba a disgusto donde estaba.

Aun así, Yunho no entendía que había pasado. Lo último que recordaba era abandonando su camarote tras descubrir los moretones que él le había proporcionado a su mascota. No debería haber ninguna razón para que Jaejoong estuviera durmiendo tranquilamente en sus brazos, y, al parecer, jodidamente contento de estar ahí.

Yunho empezó a girarse, pero de repente se dio cuenta de que todavía estaba dentro de Jaejoong, su nudo desenfundado y sujeto a su compañero. Su cola estaba firmemente enredada alrededor del pene flácido de Jaejoong, la punta presionando contra sus testículos. Sus ojos cayeron hacia el cuello de Jaejoong, y se estremeció al ver las marcas
profundas de sus colmillos ahí. Yunho gimió y dejó caer su cabeza de nuevo hacia la almohada. Había marcado a Jaejoong, convirtiéndole en su compañero. Yunho no podría
separase de Jaejoong jamás. Moriría sin él, volviéndose literalmente loco si estaban separados por demasiado tiempo, y mataría a cualquiera que intentase quitarle al pequeño hombre.

Jaejoong era el compañero de Yunho hasta que ambos exhalasen su último suspiro. Ninguno sabría tan dulce. Ninguno iba a hacer que la sangre llegase tan siquiera a la polla de Yunho. No iba a desear a otro durante lo que le quedaba de vida. Esa parte no le importaba demasiado a Yunho, ya que Jaejoong le había parecido perfecto desde el primer momento.

Le preocupaba más el hecho de que su posesividad e instintos protectores serían como demostraba su amor por Jaejoong. Si antes pensaba que era autoritario y dominante, todavía no había visto nada. Le sería imposible controlar su necesidad de protegerlo contra cualquier cosa que considerase una amenaza hacia Jaejoong o hacia su territorio.

En otras palabras, si alguien tan siquiera mirase mal a Jaejoong, o simplemente le mirase, Yunho sentiría la imperiosa necesidad de arrancarles la espina dorsal por la garganta. Aunque Jaejoong pareciese indefenso ante la pura masa corporal de Yunho, el pequeño hombre ahora tenía todo el poder en su relación. Jaejoong iluminaba el alma de Yunho. Sería la cosa que Yunho atesorase sobre todas las demás. La felicidad y satisfacción de Jaejoong ahora eran las principales metas en la vida de Yunho. Todo lo demás era secundario.

Un pequeño gemido del hombre pegado a su pecho sacó a Yunho de sus contemplaciones. Miró hacia abajo para ver como los párpados de Jaejoong se movían mientras se despertaba. Yunho tragó con dificultad, inseguro de cuál sería el recibimiento del hombre que ahora era su compañero. ¿Le tendría miedo ahora? No era como si Yunho hubiera hecho tan bien hasta ahora en lo concerniente al hombre.

"Hola," Jaejoong alzó la mano para posarla sobre la mejilla de Yunho. "Has vuelto. ¿Cómo te encuentras?"

La mandibula de Yunho casi cayó al suelo mientras miraba a Jaejoong con asombro. "¿Estás—no estás asustado?" Se mentalizó para la respuesta de Jaejoong, intentando
proteger su corazón, pero era demasiado tarde. Lo habían envuelto en papel de regalo y puesto un bonito lazo y entregado a Jaejoong en el mismo instante en que lo había
convertido en su compañero.

"¿Debería?" Jaejoong río por lo bajo. Se giró para mirar al otro lado y se acurrucó de nuevo contra Yunho. "Si hubieras querido hacerme daño, lo habrías hecho anoche cuando perdiste la cabeza y destrozaste el comedor."

"¿Destrocé el comedor?"

"Sip, y casi te cargaste a un tipo de pelo castaño también."

"Yoochun." Yunho supo de inmediato a quién se refería Jaejoong.

"¿Yoochun?" Jaejoong giro la cabeza para mirar a Yunho.

"¿Quién es Yoochun?"

La manera en que Jaejoong frunció el ceño y el brillo de celos en sus ojos hicieron que el corazón de Yunho latiese más deprisa. "Yoochun es mi segundo al mando." Yunho
sonrió cuando los ojos de Jaejoong se estrecharon. "Solo somos amigos, y es lo único que seremos. Nunca he sido más que amigos con cualquiera de mi tripulación. Además, mascota, ahora te tengo a ti. No necesito nadie más."

"¿Siempre me tienes que llamar tu mascota?" Jaejoong refunfuñó mientras se relajaba de nuevo. "¿No puedes, aunque sea una sola vez, llamarme por mi nombre?"

Yunho agarró la mandibula de Jaejoong y giró su cabeza hasta que estuvieron encarados. Podía ver el dolor en los ojos azul-grises de Jaejoong y no lo podía soportar.

"Jaejoong, mi hermoso Jaejoong," canturreó antes de bajar su cabeza y reclamar los labios de Jaejoong como suyos. 
 
El beso era como el calor abrasador que unía dos metales, quemándoles a ambos. Aunque estaba anudado en Jaejoong y enterrado profundamente dentro del culo de Jaejoong,
Yunho podía sentir como su polla se endurecía cuando Jaejoong se abrió y se rindió al beso. La lengua de Yunho lamió los dulces labios de Jaejoong antes de penetrar en su boca. Su mano rozó el cuerpo de Jaejoong para encontrar una dura respuesta en la ingle del hombre.

Envolviendo la verga caliente de Jae con su mano, Yunho le acarició suavemente hasta que el hombre gimió carnalmente en su boca. Yunho empezó a mover las caderas, empujando con cuidado dentro de la suave seda que lo sujetaba tan íntimamente. Era tan perfecto que casi lloró. En vez de eso se encontró jadeando.

Jaejoong se separó de sus labios, y giro la cabeza, mirando hacia la cama.

"Muérdeme, Yunho, muérdeme como hiciste anoche."

Yunho no necesitaba más alicientes. Se inclinó y hundió sus colmillos en la suave piel de Jaejoong, el dulce sabor de la sangre del hombre inundando su boca de inmediato. Yunho gruñó alrededor de la carne que tenía en su boca, abrumado por la sensualidad de tomar a su compañero.

Con un grito, Jaejoong llenó su mano de crema. El olor de la corrida de su compañero combinaba agradablemente con el de su piel. El saber que había dado placer a su
compañero era todo lo que Yunho necesitaba para correrse. Sintió como su polla engrosaba dentro de Jaejoong hasta que apenas se pudo mover. El nudo sujeto al bulto dulce de Jaejoong vibró en el momento en que Yunho se corrió, llenando al hombrecito con su esencia. Yunho cerró los ojos y una ola de placer le inundó en el mismo momento en que Jaejoong gimió entrecortadamente y más líquido caliente cubrió su mano.

Yunho retrajo sus dientes, lamiendo cada pequeña herida, saboreando cada gota de sangre que tocaba su lengua. Podía ver los jadeos de Jaejoong en el pulso en su cuello. Le hacía feliz saber que estaba coordinado perfectamente con su propio latido.

"Mi precioso Jaejoong," susurró mientras hocicaba el lado de la cara de Jaejoong.
"Mi precioso pequeño compañero humano."

" ¿Compañero?" Se giró para mirar a Yunho, frunciendo el ceño con curiosidad. "¿Eso tiene que ver con todo eso del marcaje del que hablaba Doc?"

"Puede," Yunho contestó con cuidado, no queriendo contestar sin saber exactamente que le había Doc a Jaejoong.

"¿Tiene que ver con el hecho de que no puedes salir de mi culo inmediatamente?" Jaejoong se encogió de hombros un poco a la vez que su cara se sonrojaba. "No es que me
importe. Es bastante interesante que tengas que acurrucarte conmigo. Solo es que tengo curiosidad por saber que es."

"Se llama un nudo," a Yunho le hacía gracia el sonrojo de Jaejoong, especialmente considerando que todavía estaban unidos. "Cuando un Phangar marca a su compañero, su polla se hincha durante el marcaje y se anuda dentro de su escogido."

"¿Por qué?"

"Muchas razones, me imagino," dijo Yunho. "Si mi escogido hubiera sido mujer sería para asegurar que mi semilla la fertilizase."

Jaejoong resopló. “Eso sí que no va a pasar."

"No, pero asegura que tenemos tiempo para nosotros después del sexo, tiempo para sujetarnos y simplemente estar juntos, o hablar o dormir o lo que queramos. Solo que tenemos que hacerlo juntos."

"¿Ocurrirá cada vez que tengamos sexo?"

Yunho se sintió lleno de felicidad al oír las palabras de Jaejoong. Jaejoong quería tener sexo con él otra vez. Envolvió el muslo de su compañero con su cola, sonriendo cuando el hombre gimió al acariciar sus pelotas con ella. "Puede."

"Entonces . . . ¿esto significa que soy tu compañero?" Jaejoong apenas respiró.

Yunho podía oír las dudas en la pregunta. Agarró la barbilla de Jaejoong de nuevo hasta que este le miró. "Eres mi compañero escogido, Jaejoong."

Jaejoong parpadeó, dudoso. "¿Qué significa eso?"

Yunho dejó que Jaejoong apartara la cara y acurrucó al hombre aún más contra su pecho, apoyando la barbilla en la cabeza de Jaejoong. "Significa que me perteneces."

"Ya te pertenecía, ¿recuerdas?" La voz de Jaejoong estaba llena de sarcasmo. Rechinó los dientes. "Me compraste. Soy tu mascota."

"Sabía quién eras en la casa de subastas, q eras mi compañero," dijo Yunho. "Doc sugirió que te diera tiempo para que me conocieras antes de marcarte."

"Qué idea más idiota," dijo Jaejoong bruscamente.

"Preferiría mil veces ser tu compañero que no tu mascota."

"Para el resto del mundo, siempre serás mi mascota," Yunho se resignó a hacer enfadar a su compañero. Se le daba bien, al parecer. "Hay muy pocas razas que reconocen el marcaje con un humano. La mayoría te verá solo como mi mascota. Y para el resto del mundo, por tu seguridad, tenemos que dejarlo así."

"Eso sign--" Yunho sintió a Jaejoong tragar saliva. "¿Significa que todavía vas a castigarme?"

"No quiero azotarte sin motivo, Jaejoong, pero tienes que entender que hay reglas que tienes que obedecer, reglas que son por tu propia seguridad." Yunho respiró hondo.

Podía sentir la tensión en el cuerpo de Jaejoong. "Estas en un mundo del que no conoces nada, y no quiero que te pase nada malo."

"¿Y lo otro?"

"¿Otro?" Yunho frunció el ceño. No sabía que la cara de una persona podía volverse tan roja como la de Jaejoong.

"Cuan—cuando me to-- tocaste—en la en-- enfermería," Jaejoong tartamudeó antes de enterrar su cara en la almohada.

Cuando Yunho se dio cuenta de lo que hablaba Jaejoong, quiso condenarse al más profundo de los infiernos. Esto era por lo que Jaejoong había estado tan disgustado cuando le había echado la loción, por qué había mentido. Jaejoong se pensaba que le estaba castigando de nuevo. También explicaba las súplicas de Jaejoong.

"No, nunca te castigaré así, Jaejoong, lo juro," dijo Yunho con vehemencia. "No era un castigo, y siento que lo hayas visto como uno. Estabas tan disgustado y pensé que si te distraía de lo que estaba ocurriendo . . ."

"¿Así que decidiste hacerme una paja?"

"¿Una paja?" Yunho frunció el ceño. "No conozco este término."

"Una paja . . . jugar con mi verga."
Yunho inclinó la cabeza hacia un lado y arqueó una ceja. "Funcionó, ¿no? Te olvidaste por completo de lo que estaba haciendo el doctor y te concentraste en que te estaba haciendo una paja."

"También te odié por ello," Jaejoong contestó secamente. "¿Es eso lo que quieres? ¿Qué te odie cada vez que me toques?"

Yunho cerró los ojos, lleno de remordimientos por sus palabras y acciones. "No, Jaejoong," dijo suavemente, "eso no es lo que quiero. Jamás quise que odiaras que te tocara. Simplemente estaba intentando ayudarte."

Jaejoong estuvo callado tanto tiempo que Yunho empezaba a pensar que había destrozado algo con sus palabras desconsideradas, y que nunca podría arreglarlo. Sintió el dolor en su corazón, y las lágrimas asomarse a sus ojos. "Lo siento, Jaejoong."

"No lo hagas más," dijo Jaejoong. "Si vas a tocarme, hazlo, pero no lo uses como una forma de castigo. No quiero odiarte."

"¿Algo más?" Yunho se sintió lleno de alegría al saber que Jaejoong le iba a dar una segunda oportunidad.

"Bueno, me gustaría pedirte que nunca más me castigaras, pero no creo que vayas a aceptar. Creo que lo mejor sería que me dijeras exactamente qué es lo que esperas de mí."
Yunho sintió el nudo retraerse con algo de pena. Se liberó con cuidado del cuerpo de Jaejoong, y le empujó hasta que estaba sobre su espalda. Quería ver a su compañero
mientras hablaban. Quería ver las expresiones en su cara y poder mirar a esos preciosos ojos azul-grises.

"Me gustaría decirte que nunca de eso será un problema, pero no quiero mentirte. Estás en un mundo desconocido y no es fácil vivir aquí. Con la excepción de los que viven en esta nave no me fío de nadie. Eso me ha mantenido con vida."

"Haces que suene como un sitio horrible," Jaejoong frunció el ceño.

"No es tan malo, de verdad, pero sí que hay peligros."

"¿Cómo qué?"

"Bueno, ya te he dicho que los humanos no son parte de la Alianza de la Planetas Unidos. Por eso no tienen derechos." Yunho escogió sus palabras con mucho cuidado.

"¿Sabes lo mal que está eso?"

"Bueno o malo, es como es, Jaejoong. A menos que lleves mi marca, cualquiera podría separarnos. Cualquiera fuera de esta nave te considerará propiedad."

"Sí, sobre la cosa de la marca," Jaejoong empezó a jugar con un mechón del cabello negro medianoche de Yunho. "¿Qué es exactamente?"
"Todas las mascotas deben de llevar la marca de su amo. Le dice a los demás que tienes un dueño legal y que me perteneces a mí. Siempre que tengas la marca, es ilegal
en todos los sistemas gobernados por la Asociación de Planetas Unidos."

"Espera," dijo Jaejoong mientras puso su mano en el pecho de Yunho, "¿alguien me podría llevar por las buenas?"

"Los humanos son codiciados en muchos sistemas. Son muy buenas mascotas. Con tu color y apariencia, serías un Tesoro aún más grande. No me cabe ninguna duda de que muchos te querrían."

"¿Pero no les dejarás, verdad?" preguntó Jaejoong rápidamente. "¿Te pertenezco a ti y te vas a quedar conmigo, verdad?"

Yunho acarició la cara de Jaejoong. "Claro que me quedo contigo. Para eso sirve mi marca. Eso es por lo que tienes que hacer siempre lo que te digo, también. Hay muchos peligros ahí fuera, como te he explicado, peligros que no entiendes. Si haces siempre lo que te digo, te puedo mantener a salvo de esos peligros."

"¿Dolerá?"

"¿Que si dolerá qué?"

"¿La marca? ¿Dolerá?"

Yunho bajó la mano para tocar la suave piel de la garganta de Jaejoong, mientras pensaba en el proceso de poner la marca. "Puede," Yunho deseaba poder decirle lo contrario a su compañero, "pero solo durante un ratito. Podría pedirle a Doc que te sedase mientras se hace y despertarte después."

Jaejoong sacudió la cabeza. "Prefiero estar despierto."

"Como quieras, mascota." Yunho estaba disfrutando de la sensación de la piel suave de su compañero bajo sus dedos. "¿Te gustaría saber qué tipo de marca he escogido?"

Jaejoong asintió con la cabeza.

"Hay un diseño que simboliza mi clan, mi pueblo. También hay un diseño que simboliza mi nombre de familia. Si combino los dos y añado un toque especial, podríamos tatuarlo aquí," Yunho acarició con su mano alrededor del cuello de Jaejoong. "Todo el mundo sabría que me perteneces."

"¿Y tú?" susurró Jaejoong. "¿También te pondrás una marca?"

"¿Eso quieres?" Yunho observó, fascinado, como la cara de Jaejoong se tornaba de un color rojo. Sabía por la manera en que Jaejoong evitaba su mirada que el hombre quería que él también llevase una marca. "Creo que marcas conjuntadas serían divertidas, pero la mía tendría que ser en
mi brazo, ¿bueno? Solo las mascotas llevan la marca en el cuello."

Jaejoong sacudió la cabeza. "Claro, lo entiendo. Doy gracias de que quieras llevar algo por mí."

"Somos compañeros ahora, Jaejoong. Te pertenezco tanto como tú me perteneces a mí. Nunca podré estar con ningún otro. Nunca desearé a ningún otro."

La cabeza de Jaejoong se inclinó a un lado. Parecía asombrado, ojos grandes y boquiabierto. "¿En serio?"

"En serio." Yunho sonrió. "Ha desaparecido el deseo que sintiera por cualquiera excepto por ti."

Jaejoong se rió por lo bajo. "Me gusta esa idea."

"Sin embargo, crea unos cuantos más problemas para ti." Yunho sonrió al ver la confusión en la cara de Jaejoong. "Eres compañero de un Phangar, una de las razas más feroces de la galaxia. Esa ferocidad viene acompañada de mucha agresión."

"¿Y eso qué significa?"

"Nunca te quedes muy cerca de nadie. Puedo percibirlo como una amenaza a lo que me pertenece. Nunca hagas algo que te ponga en peligro. Si algo te pasara, no creo que pudiese controlar mi furia. Y por favor sé paciente cuando me pongo posesivo."

"¿Quieres decir cuando te frotas contra mí y ronroneas?"
Yunho cerró brevemente los ojos y asintió. "Sí."

"Aunque," dijo Jaejoong tímidamente, "Eso me gusta. Me hizo sentir seguro y amado."

"Solo recuerda que cuando estoy así, tu seguridad es mi única prioridad. Mataré a cualquiera que intente apartarte de mí, aunque sea un amigo. Tú serás la única persona que reconozca. Tu olor, tu sabor. Pero tú nunca estarás en peligro cuando esté así. Moriría antes que hacerte daño."

"Eso supuse en el comedor."

Yunho sonrió. Inclinó la cabeza hacia abajo y la frotó contra Jaejoong, dejando escapar un pequeño ronroneo. Le asombraba el poder que parecía tener sobre su pequeño
compañero. El hombre gimió de placer y se arqueó contra él sensualmente.

"Dios, me encanta como tu pecho ruge cuando haces eso."

Yunho ronroneó más fuerte. No había visto esta faceta de su compañero antes y le intrigaba. También era una faceta de que quería ver más. Jaejoong parecía tan desinhibido, como si fueran simplemente dos amantes en la cama, en vez de amo y mascota.

La posesividad que sentía Yunho por Jaejoong de repente se hizo con el control de sus emociones. Necesitaba ver a su pequeño compañero marcado para que todo el mundo supiese a quien pertenecía. Tenía que ver su marca en Jaejoong ahora, por su propia tranquilidad.

"Jaejoong, mascota, quero verte con la marca."

"¿Ahora?" Los ojos de Jaejoong se abrieron y se inclinó hacia atrás para mirar a Yunho como si estuviera loco. "¿Cómo, ahora mismo?"

Yunho asintió con la cabeza.

"Um, bueno."

"¿No quieres llevar la marca?"

La cara de Jaejoong enrojeció de nuevo. "No, no es eso." Bajó la mirada a la vez que se encogía de hombros.

"Es que pensé que íbamos a . . . bueno . . . ya sabes"

Yunho se sentía lleno de felicidad. Jaejoong estaba diciéndole que deseaba acostarse con él otra vez. No podía sentirse más feliz, pero aunque deseaba follarse a su pequeño compañero otra vez, ahora mismo necesitaba ver su marca en el hombre. Después le follaría contra una pared.

"Y lo haremos, te lo prometo. Una y otra y otra vez." Yunho se levantó de la cama, estirando la mano hacia Jaejoong. "Pero ahora mismo quiero verte con mi marca."

"Tú y tu marca." Jaejoong se rió mientras tomaba la mano de Yunho y se bajaba de la cama. "Estás obsesionado."
"Quiero verte con mi marca," dijo Yunho a la defensiva mientras se vestían. "Quiero que todo el mundo sepa que me perteneces a mí."

Jaejoong entornó los ojos y puso las manos sobre sus caderas. "Bueno. Ya que vamos a salir de nuestra habitación, ¿crees que podrías darme algo de ropa? Alguien rasgó las mías ayer por la noche."

Si las mejillas de Yunho se hubieran podido sonrojar, ahora mismo estarían ardiendo. Sin decir palabra, se encaminó hacia un panel en la pared y lo activó, haciendo que una puerta se abriera. Yunho agarró un traje y se lo pasó a Jaejoong.

"¿Quieres que me ponga esto?" Jaejoong levantó el traje hacia su cuerpo con incredulidad. Cayó hacia el suelo y se posó ahí, obviamente muchísimo más grande que el pequeño cuerpo de Jaejoong.

"Solo póntelo, mascota, confía en mí."

"Sí, claro," Jaejoong empezó metiendo las piernas y luego tiró del traje por encima de sus hombros.

Yunho sonrió al ver lo adorable que se veía a Jaejoong en ropas que obviamente eran demasiado grandes para él.

Tiró de la cremallera hacia arriba. En el momento en que abrochó el botón encima de la cremallera, el traje se encogió a la talla de Jaejoong. 

Jaejoong chilló y tiró del material, el pánico evidente en su cara.

"Jaejoong, relájate, tranquilo" Yunho agarró la mano del hombre cuando Jaejoong empezó a tironear del cuello del traje. A Yunho le costaba muchísimo no echarse a reír. "El material está programado para ajustarse a la talla del que lo lleva. El botón de arriba lo activa."

"¿Y no se te ocurrió avisarme?"

"No, lo siento." Yunho se encogió de hombros.

"Supongo que yo ya estoy acostumbrado."

"Bueno, para la próxima vez, di algo, ¿bueno? Eso me puso los pelos de punta." Jaejoong se pasó la mano temblorosa por su pelo. "Pensé que me iba a estrangular."

"Bueno, si te sirve de consuelo, te queda increíblemente bien."

"¿De verdad?" Jaejoong empezó a retorcerse de un lado a otro para intentar verse en el traje gris. Parecía que su pánico había sido reemplazado por curiosidad.

Yunho no mentía, el hombre estaba de muerte. El material gris se pegaba tanto a la piel de Jaejoong que parecía que estaba pintado en ella. Yunho casi estaba en contra de
que saliera así. La única razón por la que Jaejoong saldría con el puesto era que era un traje común y nadie excepto Yunho iba a tener ningún problema con él. Yunho envolvió
la cintura de Jaejoong con un brazo posesivo y lo abrazó. "Quédate cerca, ¿vale?"

Asegurándose de que Jaejoong se quedaba a su lado, Yunho los dirigió hacia la enfermería. Se encontró con varios miembros de su tripulación, pero la mirada feroz de
Yunho les hacía perder el interés rápidamente. Yunho se suponía que después de lo que había pasado la noche anterior, pocas personas de su tripulación querían hablar con él en esos momento. Más tarde les explicaría qué había pasado. Mucho, mucho más tarde.

"¿Doc?" Yunho encontró al médico azul saliendo de otra habitación, con un historial en la mano.

"Yunho, no pareces estar muy mal," dijo Doc.

"¿Cómo te sientes?"

"Avergonzado."

"Tonterías," Doc posó el historial en la mesa. "No estabas en tu sano juicio. Todos lo sabemos. Me alegro de que tu mascota estaba aquí para tranquilizarte."

Yunho vio como el médico miraba a Jaejoong de arriba a abajo. Sabía que el médico lo hacía para comprobar la salud de Jaejoong, pero no pudo evitar que se escapara un
pequeño gruñido. Los ojos de Doc se encontraron con los suyos y el hombre retrocedió un paso.
"Bueno, puedo ver que Jaejoong está perfectamente."

El médico juntó las mano. "¿Puedo suponer que son compañeros?"

"Sí, Jaejoong es mío." Yunho no se dio cuenta de lo agresivas que eran sus palabras hasta que sintió como el codo de Jaejoong le golpeaba el abdomen. Aunque el golpe no
le dolió en absoluto, Yunho gruñó para que Jaejoong supiese que lo había entendido.
"Lo siento, Doc. Jaejoong y yo estamos aquí para que nos pongas nuestras marcas."

"¿Nuestras marcas?"

Yunho sonrió. "Sí. Jaejoong tendrá la suya alrededor del cuello. Yo tendré una igual en mi brazo."

Los labios de Doc se apretaron un momentos y después asintió. "Muy bien. Haz que tu mascota se suba a la mesa y que se baje el traje hasta la cintura." Se encaminó hacia una vitrina y empezó a sacar algunos objetos. "Yunho, ¿vas a hacer que tu mascota duerma durante el proceso?"

Yunho se rió por lo bajo cuando Jaejoong entornó los ojos. Sabía que a Jaejoong no le gustaba que hablasen de él como si no estuviera ahí, pero hasta que Yunho le diera
permiso, Changmin no le hablaría directamente a Jaejoong. Iba en contra de las Leyes de Propiedad.

"Jaejoong, ¿no vas a contestar a Doc?"

Las cejas de Jaejoong se elevaron. "¿Quieres decir que se me permite hablar?"
Yunho juraría que oyó una risita del médico, pero cuando le miró, la expresión de su cara era seria. Yunho se giró hacia Jaejoong y le levantó para sentarlo en la mesa.
Desabrochó el botón y miró como su mascota se bajaba el traje hasta la cintura.

El deseo le asaltó al ver el pecho desnudo de Jaejoong, sus tensos abdominales y su suave piel pálida. Jaejoong era de verdad el compañero perfecto. Yunho gimió y se lamió los labios. Casi no podía resistirse a pasar sus manos por esa piel.

Jaejoong arqueó una ceja, y le apuntó con un dedo.

"No empieces."

Yunho sonrió y se giró hacia Changmin cuando se acercó con una videotableta. "¿Qué quieres exactamente para la marca, Yunho?"

"Algo como esto," Yunho cogió el lápiz óptico y empezó a dibujar en la tableta. Tras varios minutos dibujando, estaba satisfecho con el diseño que tenía, así que le alcanzó la videotableta a Doc. "Este. Y yo tendré lo mismo en mi brazo."

El médico no dijo nada, pero Yunho vio cómo se curvaban hacia arriba sus labios mientras iba a buscar la máquina para marcar. Changmin regresó hacia ellos y se puso junto a Yunho mientras encendía el pequeño aparato y pulsaba varios botones.
Yunho vio a Jaejoong mirar horrorizado el pequeño aparato y se rió suavemente. "No dolerá mucho, Jaejoong, te lo prometo."

"¿Cómo rayos funciona?"

"¿Ves el diseño que dibujé?" apuntó hacia la pantalla de la videotableta.

Jaejoong miró el dibujo y se quedó boquiabierto. Por un momento Yunho pensó que a Jaejoong no le gustaba el diseño, hasta que el hombre le miró. "Yunho, esto es maravilloso. ¿Tú has dibujado esto?"

"Bueno," Yunho estaba encantado con la reacción de Jaejoong ante el diseño. "Tuve un poco de ayuda. Los diseños tribales de mi gente y de mi familia ya estaban en el
computador. Simplemente los adapté un poco para encontrar un diseño que me gustaba."

"Es precioso, Yunho." Sonrió al mirar a su amo.

"Pensé que ibas a proponer algo realmente horrible, pero este es muy bonito. Me gusta. Te va a quedar muy bien en el brazo."

"¿Sí?"

"Sí." Los ojos de Jaejoong se abrieron de par en par cuando Doc se inclinó hacia él, el aparato de marcar en la mano. El pequeño hombre se inclinó hacia atrás y señaló al aparato. "Um, ¿cómo funciona esa cosa?"
"Ahora que se ha transferido el diseño desde la videotableta, Doc simplemente lo pasa por tu cuello y el aparato hace todo el trabajo. No llevara más que unos minutos."

"Je, genial," Jaejoong estaba asombrado. "Hacer un tatuaje en la Tierra lleva horas."

"Es un poco diferente a un tatuaje de la Tierra, Jaejoong. No se puede quitar."

"¿Nunca?" Jaejoong tragó saliva.

"Nop, está codificado a tu ADN y al mío. Como tu amo, puedo escoger hacer la marca temporal, para poder modificarla si te vendiese a otra persona, o hacerla permanente."

"¿Y?"

"Es permanente, Jaejoong. Nunca será borrado o cambiado."

Yunho no se había dado cuenta de la tensión en el cuerpo de Jaejoong hasta que el hombre se relajó con un suspiro audible. Rodeó la cintura de Jaejoong con un brazo, acunando al hombre contra su pecho. "Me quedo contigo, Jaejoong. Nada de marcas temporales."

La piel de Yunho cosquilleó cuando Jaejoong le acarició el brazo. "¿También para ti?"

"Sí, mascota, también para mí."

18 comentarios:

  1. Oooooh este capítulo estuvo genial, un Yunho posesivo es un Yunho fascinante.. Me encanta.... Gracias por actualizar.

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  2. real mente hermoso acto de amor yunho se tatuara con jae para que todos se den cuenta que ambos se pertenecen el uno al otro y que nadie tiene la oportunidad de que se quede con su hermoso jae
    gracias

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  3. tan hermosos estos dos.... me encanta Yunho con su posesividad y Jae con su complacencia.... los dos están deseosos de pertenecerse mutuamente.
    me reí con el traje que se ajustaba a medida y Jae creía que el traje lo iba a estrangular. lol
    muchas gracias por actualizar tan pronto
    realmente se agradece eso , a veces espero tanto tiempo por leer una actualización de algún fic, que llega un punto en que me olvido de cómo seguía y también pierdo la emoción de la historia..
    gracias

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  4. Es hermoso*w* me gusta la idea de que Yunho también se tatuara :D eso demuestra que realmente ama a Jae ♥
    actualiza pronto*0*

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  5. O.O Eso quiere decir que Yunho es de Jae y Jae es de Yunho hihihi
    Gracias por la actu :3 <3

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  6. No podia ser de otra manera, ambos se perteneces para siempre, el amor, el amor.
    Gracias

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  7. uu que lindos los dos con sus marcas van a ser el yunjae por siempregracias por el capitulo

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  8. Un capitulo lleno de amorsh!!!!, a disfrutarlo, ya que me imagino que los momentos inevitablemente angustiantes llegarán.

    Gracias

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  9. este par son puro azucar y miel sobre hojuelas *_*
    para eso andan con los tatuajes ♥
    muero de ternura en verdad
    y tambiene stuvo bastante caliente cuando se despertaron xD

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  10. Awww!!! Son puro amors!!! >ㅅ< ♥ Yunho posesivo por dios!!! Como me encanta!!! >\\\<
    Pero odio éste momento cuando parece que todo va vuento en popa y zaz!! Algo pasa!! Y ya me imagino que nombre tiene ese algo!! -cofSiwoncof- ㄱㄱ

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  11. estan echos el uno para el otro!!!! me encanta la posesividad de yunho para con jae pero que al mismo tiempo sea un amor con el awww y ahora jae tendra su marca *^* asdaasdad gracias x los capos esta muy interesante ^^

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  12. owwwww todo bien hasta ahora
    espero que nadie se interponga en su felicidad ....

    muchas gracias me encantaron todos los capis
    seguire leyendo

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  13. Que detalle de YH el tener el tambien la marca ^_^ … .

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  14. Oooh! Ambos se pertenecen mutuamente *O* Que manera de despertarse la de ellos xD y todo eso de los tatuajes kyaaaa Me encanta lo posesivos que son los dos... Ambos van a estar marcaditos :3
    *se va a leer el siguiente*

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  15. No se por que, pero presiento que no todo sera felicidad.

    Ojala y me equivoque...
    gracias por el capitulo

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  16. Ame este capitulo kyyaa Yunho va hacer todo un cachorrito con Jaejoong me encanta cuán posesivo es jejeje no era de esperarse su pareja es muyy hermosa pero que acto tan romántico je de el tambien tatuarse el mismo diseño ...

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  17. Cuanto tiempo les durara este momento de felicidad.... Que se me hace que siwon hara su aparicion pronto, no creo que se haya quedado tan tranquilo cuando perdio a jaejoong en la casa de subastas.....
    A seguir leyendo n.n

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