Capítulo
6 +18
Jaejoong
entró en la habitación y se sentó en la silla del club más
cercana a la ventana.
Yunho
inclinó un fuerte hombro contra la puerta y ladeó su
cabeza hacia un lado, mirándolo.
Jae
cruzó sus tobillos y lo miró.
—Mi
esposo está teniendo una aventura, Yunho.
Tuvo
la gracia de lucir genuinamente asombrado, después esperó
y lo miró para que continuara.
—Y
aquí está la cosa. Justo en este momento, está Dios sabe dónde
con Dios sabe quién hasta la semana que viene, y no creo que
siquiera me importe.
¿Cuán
bien se sentía decir eso? Jaejoong se sintió momentáneamente
atónito por la fuerza de su alivio al escuchar sus propias
palabras en voz alta. Minho lo había menospreciado lo
suficiente con su desinterés casual por el tiempo suficiente.
La aceptación era un alivio.
Yunho
cruzó la habitación lentamente, sin quitar los ojos de Jae
nunca, y se sentó en la silla opuesta.
—Es
un maldito idiota.
Jaejoong
se encogió de hombros y miró por la ventana. —A lo
mejor.
Ha
evitado tener sexo conmigo por más de seis meses ya.
—Lo
diré otra vez. Es un maldito idiota.
—Sí.
Jaejoong
miró el lado opuesto de Yunho. Jesús, era hermoso. Si iba
a ser infiel con alguien, este pecaminoso y sexy hombre era
perfecto.
—¿Ayudaría
si follamos?
Jaejoong
rió y puso las manos en sus mejillas por la sorpresa.
—¿Podemos
por lo menos tomar una bebida primero?
Yunho
le arqueó una ceja y cruzó la habitación para abrir un
elegante gabinete. Regresó momentos después, colocó una
cubeta de champaña y dos copas en la mesa entre ellos,
después se sentó al lado opuesto a Jae otra vez.
—Quítate
el traje —dijo suavemente.
Jaejoong
contuvo el aliento. Si pensó que se sentía excitado
antes, se equivocaba.
Ahora estaba excitado.
Se
levantó lentamente y le dio la espalda. —Necesito ayuda
con los botones —No lo necesitaba, de hecho. Pudo haberlo
quitado fácilmente por su cabeza sin desabotonarlo como lo hizo
esta mañana, pero eso no parecía apropiado para este
momento. Se quedó allí por unos segundos y el horrible
pensamiento de que probablemente no se levantaría y lo
ayudaría lo golpeó. Se desvaneció en el instante que
sintió que levantó el peso de su cabello en un solo
hombro para ayudarle con los botones desde el cuello.
Sus
dedos enviaron una onda de calor contra su cuello, y tomó
todos sus esfuerzos para no girarse. El suave y cadencioso
movimiento de sus dedos se sentía indecente en la
silenciosa
habitación. Jaejoong no podía estar seguro, pero pensó que Yunho
acarició ligeramente con las puntas de sus dedos su columna
vertebral mientras lo hacía.
—Quítatelo
—suspiró contra su oído, luego se deslizó de regreso
en su silla para mirarlo, sus largas piernas extendidas frente a él.
Jaejoong
se giró para mirarlo, y la cruda lujuria en sus ojos era
tan desconocida, tan poderosa, que no pudo alejar sus ojos. Se quitó
la chaqueta y luego la camisa, primero
de
un hombro y luego el otro, después contuvo el aliento mientras
dejaba ir el material y permitía que cayera al piso.
Los
ojos de Yunho se movieron lentamente de los suyos, y luego
a sus boxers que apenas cubrían sus partes en seda negra. Jaejoong
se retorció, y peleó con la urgencia de colocar sus manos para
cubrirse.
—Quédate
quieto.
Se
inclinó, sirviendo la champaña y entregándole una copa. La tomó y
bebió profundamente, dejando que las burbujas burbujearan en
su lengua.
Sus
ojos se movieron a su estómago, y de regreso a sus boxers de seda
negra.
—Date
la vuelta.
Mierda.
Jaejoong quería recoger su ropa y correr. O… a lo mejor
no lo hacía.
Descubrió que quería darse la vuelta y
dejarlo mirar su parte trasera.
Se
dio la vuelta.
Por
interminables y silenciosos segundos, no movió ni un
músculo.
Jaejoong
movió un dedo de arriba abajo por el tallo de su copa mientras
se preguntaba qué pensaba. Realmente quería ver su cara. Se bebió
la mitad de su champaña, aterrorizado al pensar que su trasero
revestido de seda no tuviera su aprobación.
Estaba
a punto de girarse cuando sintió las manos de Yunho en su cintura.
Jaejoong soltó una aguda respiración y arqueó la espalda cuando su
cálida mano se deslizó a su alrededor para extenderse
sobre su caja torácica.
Su
otra mano tomó su copa de champaña y la colocó en la mesa. Se
encontraba tan cerca de él que podía sentir su calor.
Cuando dio un paso aún más cerca, todo duro contra Jae
desde sus hombros hasta la cadera, sus manos se elevaron y
cubrieron sus pezones. Jaejoong lo escuchó hacer un sonido bajo en
su garganta, y después lo giró en sus brazos para mirarlo.
Dios,
era alto. Miró su rostro, y su mano se deslizó hacia
abajo por su columna para acariciar su trasero. Enrolló su
cabello alrededor de su otra mano, todo el camino hacia arriba de
su espalda hasta que lo tenía lo suficientemente apretado en su puño
como para levantar su barbilla.
Sus
dedos pellizcaron su nalga, justo encima del borde de seda de sus
boxers.
Minho
siempre era gentil, y en ese momento Yunho era todo menos eso.
Era
crudo, y fuerte, y Jaejoong lo deseaba más de lo que deseó a
alguien más en su vida.
¿Cómo
podía estar ahí, semidesnudo en sus brazos sin siquiera
haberlo besado?
Deslizó
sus manos a lo largo de la pared de su pecho y lo tocó
por primera vez.
Sus manos registrando el duro calor, y aún
a través de su camisa, podía sentir el constante latido de su
corazón.
—Desabróchala.
Oh,
sí, por favor. Jaejoong desabrochó cada botón y deslizó el
material negro por encima de sus hombros, sacándola de sus
brazos y tirándola hacia el piso.
Cerca
y con el pecho desnudo, Yunho era un fabulosamente detenedor
de corazones.
La suave piel de sus pezones se rozó en contra
de su duro pecho, y Jaejoong se derritió contra él.
La
respiración de Yunho era audible pero constante mientras
sostenía sus manos. Puso ambas detrás de su espalda con
una de sus largas manos, mientras que deslizaba la otra
alrededor de la base de su cuello para atraer su boca a la suya.
Estaba
cautivo, a su merced, y le encantaba.
—Hermoso
Jaejoong —murmuró en contra de sus labios, y luego, por
último, bajó su cabeza y lo besó.
Los
sentidos de Jaejoong se tambalearon ante el primer toque de
su boca en la suya, suave y después duro y tan lleno de un
propósito sexual que se estremeció. Mordió sus labios y después
los lamió. Exploró su boca con su caliente y potente lengua
mientras su firme mano acunaba la parte trasera de su cabeza.
Ser
besado por Yunho hacía que Jaejoong se sintiera como si
cualquiera que hubiera besado antes debiera de hacer fila
para tomar lecciones de él. Sus rodillas cedieron, pero lo tenía
tan asegurado en su agarre que ni siquiera importó.
—Tranquilo
—murmuró en su boca.
Sus
manos se deslizaron alrededor de su garganta, y después hacia abajo,
moviéndolas a través de sus pequeños, suaves y erectos
pezones rosas.
Jaejoong
se arqueó contra él, desesperado por más, y gimió cuando su
erección se presionó, dura, en su estómago.
Levantó
su cabeza para mirarlo a la cara, después acomodó su
rodilla entre sus piernas.
—No
tienes idea de en cuantas formas voy a hacer que te vengas.
Jaejoong
sólo aulló. Era indecente, y no podía tener suficiente de él. Se
sentía desesperado por tocarlo, pero sostuvo sus manos más
apretadas una fracción cuando se retorció en un intento por
liberarlas.
Yunho
negó con la cabeza. —Todavía no, dulzura. —Deslizó su
muslo más a fondo entre sus piernas. Deliciosa fricción. Con su
mano libre jaló suavemente sus pezones y dirigió hacia ellos sus
ojos.
Jaejoong
jadeó y sintió sus pezones endurecerse mientras lo miraba
inclinar su cabeza ligeramente hacia un lado y mirar
abiertamente su cuerpo. Balanceó su erección más duro
contra Jae y lamió sus labios mientras su acelerada
respiración contradecía su aparentemente indiferente control.
Estaba tan excitado como Jae lo estaba.
—Tan
rosados. —Se inclinó para succionar por turnos cada
pezón, sacando un chisporroteo de deseo de la garganta de
Jaejoong. Quería empujar las manos por su cabello y
sostenerlo ahí, pero no liberaría sus muñecas. En vez de eso,
comenzó a mecerlo en su muslo. La seda de sus boxers rozó su
sexo. Hacia atrás. Hacia adelante. Hacia atrás. Hacia
adelante. Duro, hasta que lo montó como un bailarín exótico
en un tubo, desvergonzado de su necesidad por él para terminar lo
que comenzó entre sus piernas.
—Eso
está mejor —canturreó, besando su garganta cuando dejó caer la
cabeza de Jaejoong hacia atrás—No te reprimas . —Jugó con
sus pezones, mirando a su rostro por reacciones. Acariciando.
Lamiendo. Succionando. Rodando sus pezones lo suficientemente duro
para enviar dardos de deseo en respuesta a través de su cuerpo.
—Yunho…
—suspiró su nombre—. Yunho…
Arqueó
una ceja cuando sus dedos trazaron hacia abajo la suave
curva de su estómago, cada toque como un millón de
pequeños voltios eléctricos.
Una
torcida sonrisa cruzó sus labios mientras daba sacudidas en su
contra. Se inclinó y besó su oído. —Dime lo que quieres que
haga, Jaejoong.
—Sus
dedos acariciaban el borde de sus boxers, haciendo que los
músculos de su estómago brincasen en respuesta—. No lo
haré a menos que me lo pidas. —Lamió el hueco en la base de su
garganta.
Sabía
exactamente lo que quería.
—Yunho,
por favor… tócame.
Su
risa en respuesta era pura obscenidad. —No es lo
suficientemente bueno, Señor Kim. —Lamió uno se sus pezones e
inclinó la cabeza—. Tienes unos pezones perfectos.
—Lamió su
pezón y movió rápidamente sus ojos hacia su rostro.
Jaejoong
miró su lengua deslizarse sobre la protuberancia rosa,
fascinado por lo que le hacía. Sus pezones palpitaron, y lo
ansiaba entre sus piernas—.
¿Es
esto lo que quieres, Jaejooong?
Deslizó
sus dedos dentro de sus boxers y acunó su miembro.
Jaejoong
se retorció con placer. —Dios, sí. Sí… —gimió y se empujó
a sí mismo hacia sus manos.
Yunho
se enderezó y lo sujetó con fuerza en su contra, su mano en sus
boxers y su lengua en su boca.
—Dime
exactamente qué es lo que quieres que haga. Di las palabras.
Jaejoong
nunca había conocido una lujuria como esta. Estaba tan
cerca de correrse, y Yunho debía de saberlo. Movió con
cuidado sus piernas, abriéndolas más y se frotó a sí
mismo contra de sus dedos. —Ábreme —susurró, e
instantáneamente sus dedos lo abrieron. Jaejoong podía sentir
su calor, los fuertes dedos rodeando su entrada, listos por órdenes.
—Toca
mi próstata —suspiró. Yunho lo miró, una expresión de
despreocupado triunfo posándose en sus ojos.
—¿Así,
precioso? —Comenzó a acariciarlo, haciendo círculos lentos
y dando en el momento justo profundos toques en su próstata curvando
sus dedos.
Jaejoong
se estremeció exquisitamente y cerró los ojos mientras las
deliciosas sensaciones escalaban por su cuerpo. Su lengua explorando
su boca, sus hábiles dedos más insistentes que nunca dentro de su
cuerpo.
—Dios,
Yunho… —Jaejoong se arqueó, tan cerca del clímax que
el único pensamiento en su mente era la liberación. Sus dedos se
deslizaron hacia afuera de su abertura, y frotó el pulgar a lo largo
de su boca—. Vamos Jaejoong, pide por más.
—Por
favor, mantén tus dedos dentro de mí —murmuró, su
corazón golpeando y su deseo calentándolo.
Yunho
hizo un sonido gutural y lo movió hacia adelante en su
muslo, después empujó dos dedos dentro de él con fuerza.
Jaejoong chilló por la intimidad, y la boca de Yunho se suavizó
sobre la suya hasta un beso muy gentil.
Acarició
su próstata encorvando sus dedos dentro de él, una y otra
vez, sin darle tregua y Jaejoong perdió las cuerdas de su control.
Sintió su clímax comenzar en la punta de los dedos de sus pies, y
la otra mano de Yunho se apretó alrededor de su cintura para
sostenerlo cuando sus piernas cedieran debajo de él.
Lo besó hasta
que su cuerpo se tensó, y empujó sus dedos más
profundos mientras se mecía duro contra su mano.
—Eso
es, precioso, déjate ir. —murmuró—. Puedo sentirte
llegando. —Sus dedos fueron dentro de Jae hasta el nudillo,
moviéndose apresuradamente en su próstata.
—Cristo,
no puedo esperar para follarte —musitó, luego empujó otra vez.
Y otra vez. Y otra vez, hasta que Jaejoong se perdió
completamente. No tenía a dónde ir además de a lo grande…
Chilló
y dejó caer su cabeza hacia atrás salvajemente, la
liberación abandonándolo. La admiración de Yunho lo hizo
sentirse poderoso, sexy y sin inhibiciones. Nunca había
sentido un orgasmo como ese, y estaba ávido por más, más,
más. Desató algo nuevo en Jae, una cruda necesidad sexual
que estuvo demasiado tiempo enterrada debajo de los desechos
de la vida diaria. Debajo de los desechos de su matrimonio
roto.
Jaejoong
no podía hacerse sentir culpable. No todavía. No con los
dedos de Yunho aun moviéndose vagamente dentro de él, y su
beso lento y atormentador aún en sus labios, mientras le
soltaba las manos.
Le
mostró cómo se suponía que era el sexo, y no había vuelta atrás.
OMG!! <3
ResponderBorrarAyy.. *O* es que.. asdfghjklñ es hermoso xD
y justamente estaba viendo YJ cuando vi la etiqueta y my god! Me fascina esto!*-*
Graciaaas Gaby! -no soy de dejar comentarios muy largos jajaja y aparte me estoy durmiendo jaja pero debía leer el capitulo, lo estaba esperando desde que vi en lo que termino el anterior! :D-
Super hot, no puedo esperar por el siguiente cap, me encanto cuando dijo ayudaría si follamos??? XD tan romántico, gracias por el cap estaba buenisimo
ResponderBorrarbesos bye
Por fin! 6 meses! Minho idiota.......
ResponderBorrarGran capitulo, creo que Jae no se atrevería, pero bueno teniendo a Yuno dispuesto. ...adelante!
Jae se murió del placer y eso que apenas fue el principio, de lo que estoy segura es que es el comienzo de un placer inimaginable para JJ >\\<
Muchas gracias.. ..muero de sueño pero tenia que leerlo.. ..
hay por dios por fin Yunho le enseñara a Jae lo que es el verdadero sexo y no lo que tuvo con su esposo que al parecer nada que ver con lo que acaba de vivir y eso que fue la mano que sera cuando lo tome de verdad ahí si que sera alucinante Gracias por el capitulo me fascino
ResponderBorrarDios muy buen comienzo de mañana para mi vista jajaja asi se hace Jae ahora viene lo bueno pues Yunho tu amado jefe te hara sentir vivo asi q jodete Minho sigue con tu puta desabrida x otro lado gracias x compartir
ResponderBorraruu 6 meses sin sexo ese minho es un estupido pero ahora esta yunho para jae jajaja y que pareja es tan recien en pesando ¡¡¡ gracias gaby por el capitulo
ResponderBorrarOH X DEOSSS..!!! la boca se me quedo seca..!!! *;;* y como dicen solo es el comienzo, 6 MESESSS..! q tiene minho en la cabeza ..?? ESTIERCOL.? en fin pero ya llego la solución llamada YUNHO el superpoderoso y sera grandioso..!!! Gracias Gaby por la actu..!!! <3
ResponderBorrarNo me esperaba esto ........ Pense que Yunho lo iba a ir seduciendo mas, hasta que a Jae ya no iba a poder soportarlo y iba a ceder y dejarse llevar ..... Pero ahora osea....... Jae se siente terriblemente atraido y Yunho esta aprovechando. Q bueno q Jae no siente culpa..... Porque es Min Ho quien lo abandono, quien lo engaña....... Y Jae es un hombre deseoso y vivo y pues Yunho esta como quiere y ademas de sexy deseo mucho a Jae .... muero por saber que va a suceder ahora.... Jae tendra una relacion clandestina con Yunho? Seran amantes? ..... Quiero saber, GRACIAS GABY!!!!
ResponderBorrarasafsfafsffsassg yunjae sexoso... *Q* ...quiero que ya follen como conejos sin control..esto solo fue tocadita ..pero aun falta lo mejor.. JJ al fin dejara todos sus prejuicios y moral, dando rienda suelta al descontrol y sexualidad que siempre han sido parte de él ,y claro que mejor que con el dios del sexo yunho!!
ResponderBorrarComo si fuera alguien intimo mi esposo me engaña . . . Jae tus fantasias se haran realidad no bastara solo xon tenerlo cerxa y trabajar con Yunho va querer experimentar todo no hay retorno a esto Jae se siente salvaje y por consiguiente bien
ResponderBorrargracias esto fue delirante
Vamos Jaejoong no es ningun tonto el ya lo sabía lo que hagas no debes de arrepentirte total nada pierdes.... omg 6 meses Minho realmente es un idiota pero alguien lo va aprovechar mejor el Jae sexy a despertado kyaa q emcion ...gracias
ResponderBorrarYunho lo hace sentir en lad nubes. Jae con yunho se libera deja salir su otro yo *q* por fin va conocer todo el placer q puede sentir gracias a su sexy y tentador jefe **estare a la espera del próximo cap. Muchas gracias gabicita <3
ResponderBorrarahora sí estoy sin palabras .. no hubo mucha previa, fueron al palo y a la bolsa nomás. esto está caliente como negro en baile
ResponderBorrarquiero más como Jae. jajajajja.
gracias
Hay Minho tu solo haces que Jae te traicione, seis meses!!! Si eres tan hombrecito para meterte con otra persona para andar traicionando deberias serlo para atender a tu esposo como se debe. Yunho Jae ya es tuyo!
ResponderBorrarGracias
Woooaa el yunjae es el yunjae , me dejo sin palabras..
ResponderBorrarY apenas van empezando, ahora si creo que vere a un jaejoong mas "liberal", aunque tengo curiosidad de saver cual sera la reaccion de minho si se entera que jae esta con alguien mas, tendra el descaro de reclamarle algo?
Gracias