Capítulo
41 +18
—¡Suéltame,
monstruo!—Jae inútilmente lo empujó. —¡No voy besarte!
¡Estabas a punto de lastimar a mi familia! —Y me llevaste lejos de
mi montaña otra vez…
—No
iba a hacerle daño a nadie—, dijo el vampiro. —Había planeado
llevarte afuera del remolque y asustarte. Entonces verías la razón.
Él
no puede mentir.
—Pero
parece que sostengo una mano de cartas de mierda.
—Yunho pasó sus
dedos por su pelo. —Te niegas a hacer lo que predije.
—Tú
no eres quien para hablar de eso.
—No era el homicida que Jae había
percibido —él lo había impresionado.
Y
ver esa mirada en sus ojos lo afectó. Junto con la prisa que acababa
de experimentar al oler el aire fresco de su casa —el bosque, la
tierra misma.
—Jae casi podía sentir… Esperanza.
Él
me sacó de mi casa, pero tal vez un día el hombre frente a mí me
devolverá allí.
En
un tono cansado, Yunho dijo, —Dime por qué besaste al muchacho.
—Para
averiguar si deseaba a cualquier hombre después de mi estancia en
prisión, o si era sólo a ti…
—¿Y?
“Él
está aguantando la respiración. Querido Dios, ¿realmente podría
tener una oportunidad con Yunho?”
—No
sentí ningún deseo por él, porque estaba deseándote... a ti.
—A
mí—. El orgullo se disparó en la profundidad de sus ojos rojos.
—Bien. No lo haré...
No
quiero tener que decapitar a Junsu. O colgarte en un cruce de caminos
de demonios.
—¿En
serio? ¡Oh, Yunho, esto es enorme! Esto es lo que yo llamaría un
momento muy importante.
—Cierra
la boca.
Jae
sonrió abiertamente.
Su
mirada descendió a su boca. —¿Quieres un beso de verdad ahora?
¿De tu propio hombre?
Mi
propio hombre. Jae casi se tambaleó. Yunho nunca lo había tratado
como su Novio; ahora su mirada sobre él era caliente y posesiva.
Lo
hago, Yun, pero voy a quererlo por mucho más que una semana. —
¡Quiero vivir!
Le
ahuecó el rostro con sus manos pálidas. —Te mantendré, Jaejoong.
—¿Significa
que… —los ojos de Jaejoong comenzaron a destellar—¿no tengo que
morir?
¿Qué
monstruo podría matar a una persona como él?
Había
estado planeándolo. No, peor que la muerte. —¡Nunca morirás!
Te
mantendré para siempre.
Debido
a que sería... su pareja.
En
Helvita, había reconocido a Jaejoong como el Novio que el destino
había escogido para él. Ahora contemplaba al astuto compañero que
había escogido para sí mismo.
De
algún modo él encontraría una manera de rodear sus votos hacía el
dios.
Era
Yunho, después de todo. Él podría averiguar cualquier cosa.
—Pero
¿qué pasará con Ren?
—Yo
me encargaré de él.
—¿Cómo?
—El
anillo todavía está en juego, ¿no? —él dijo. —Vivirás, y yo
me encargaré de Ren, pero a cambio,
es necesario que tu... —Lo agarró de los hombros. —Te pido que
olvides lo que pasó entre nosotros antes.
—¿Qué
quieres decir?
—Hag
me dijo que no podrías superar mi trato hacia ti.
—Ohhh.
¿Como las amenazas contra mí y mis seres queridos? ¿La angustia
mental y las burlas interminables? ¿Cómo el ponerme en el pabellón
de la muerte?
Yunho
frunció el ceño. —Si quieres vivir, entonces todo eso debe ser
olvidado, tal como has hecho con tus miserias anteriores. ¡Me
dijiste que has hecho eso antes!
—Puedo,
y lo haré ahora. Todo lo que te pido es que jures que nunca dañaras
a mi familia, por tu mano u orden. ¿Tenemos un trato?—Siempre
con los votos—, murmuró. —Añadiré mi propia condición.
En las siguientes semanas, no harás ninguna pregunta sobre mis
planes o acciones. Confiaras en mí para decidir qué es lo mejor
para nosotros.
Jaejoong
vaciló. —De acuerdo.—Entonces juro por el Lore que tu familia
nunca será dañada por mi mano o mi orden.
—Y
yo juro que te dejaré decidir qué es lo mejor para nosotros.
Durante tres semanas.
Él
entrecerró los ojos evaluativamente sobre Jae, pero lo dejó pasar.
—También
me dijiste que podrías hacerme feliz—. Dobló un dedo bajo su
barbilla.
—Tienes
trabajo esperando por ti.
—He
escuchado —probablemente solo sea un loco rumor—que el sexo hace
a los hombres felices. ¿Quieres sellar este trato, Yun?
Él
lo atrajo con fuerza a sus brazos. —¿Piensas que no quiero
reclamarte?
—Jae
inclinó la cabeza hacia él. —Pero crees que me harás daño.
—Cuándo
un macho humano hiere a su pareja durante el sexo, ¿qué pasa?
—Creo
que podría caminar gracioso.
—Puedo
levantar un maldito tren, Jaejoong. ¿Qué sería de ti?—Por
primera vez en su larga larga vida, se arrepentía de su fuerza — a
pesar de que había pagado tan caro por ella.
Ahora
era un obstáculo. Por no mencionar sus instintos vampíricos. Él no
era ningún mortal convertido; él era de una especie diferente, un
vampiro nacido sin impulsos humanos para atenuar su comportamiento
predador.
—Imagina
si trataras de luchar con una mariposa, pero supieras que no debes
quitar el polvo de sus alas. Es el equivalente a nuestra situación.
Jae
arrastró su índice por su pecho, diciendo en un acento sexy,
—¿Qué
pasa si la mariposa te monta como un caballo perezoso?
Yunho
se tensó alrededor de él. —Continúa.
—En
lugar de moler como hice sobre ti cuando nosotros estábamos sobre el
sofá, —dijo Jae, —podría montarte.
El
interés del vampiro definitivamente despertó. Pero entonces él
negó con la cabeza.
—No
he tenido sexo en milenios. ¿Qué te hace pensar que no perderé el
control?
—Solamente
sé que no lo harás.—Jae había tomado la decisión de que esto
iba a suceder.
El
creía que era su Novio —aunque él expresamente no hubiera
reconocido el hecho aún lo que significaba que creía que no le
haría daño.
Además,
en alguna parte de su mente, Jae realmente quería sellar este
acuerdo. Para robarlo de Ren por completo. Sólo cuida tu corazón,
Jae. Los celos anteriores de Yunho le habían provocado cosas raras.
—Está
será tu primera vez, Jaejoong, y está lejos, muy lejos de ser tu
última. No puedo arriesgarme a herirte o a asustarte. Su mano se
deslizó para acariciarlo a través de sus pantalones, ganando un
gruñido.
—No me has asustado las veces que hemos estado
juntos.—Mucho. —Todo lo que he sentido es placer.—Después un
poco de dolor.
—He
negando mis instintos contigo.
—¿Qué
quieres decir?
Yunho
pasó una mano sobre su rostro cansado. —Los vampiros no follan
como los hombres humanos. El acto para nosotros es todo acerca de la
posesión, la sangre, el dominio. Esas características serán más
fuertes si estoy dentro de ti. Dominarán mi cerebro por completo.
Cuando te conviertas en un vampiro, no tendré que contenerme tanto.
—¿Yo?
¿Convertirme en un vampiro?—¡Para! Nunca había pensado que le
pasaría a él sólo a Ren.
—Cuando
dije que te mantendría para siempre, lo dije en serio.
Jae
tragó ante la intensidad en sus palabras, el destello de sus
colmillos. Claramente una discusión para otro día...
—Tengo
una idea.
Vamos
a quitarnos la ropa y juguemos un rato sobre el sofá. Si en el viaje
tropiezo y caigo de frente sobre tu pene, entonces no será tu culpa.
—¿Perder
tu virginidad mientras estas arriba?
—Ya
he perdido esa clase de virginidad.
¿Había
enrojecido su cara? —Sería más fácil para ti si me pongo sobre
tu cuerpo una vez que te haya convertido.
Nunca
lo había visto tan devastado. Justo cuando estaba a punto de darse
por vencido, Yunho exhaló una bocanada de aire. —No puedo luchar
contra esto—. Se quitó la ropa de la parte superior. —Porque
ahora mi mente se ha obsesionado por ti cayendo de frente sobre mí
pene. Ya casi lo puedo sentir.
Sin
cuidado de su ropa, se arrancó el cinturón y los pantalones.
Cuando
su erección saltó libre, él los teletransportó a su lugar
habitual.
Mientras
se sentaba, gloriosamente desnudo, sobre el sofá, Jae se puso de pie
entre sus rodillas, quitándose sus pantaloncillos cortos. —¿Estas
nervioso, Yunho?
—Ha
pasado un rato.—Pasó la mirada sobre Jae. —Y quiero que tu
primera follada sea...
—¿Superlativa?
Sus
labios se curvaron en la sonrisa más sexy que alguna vez había
visto en un hombre, y Jae brevemente se olvidó de como sacarse su
traje de baño.
Había
sospechado que Yunho anhelaba la excitación. Ahora sus ojos estaban
radiantes por él, su respiración era ligera. Una de sus piernas se
deslizaba hacia arriba y hacia abajo.
Una
vez que estuvo desnudo, avanzó lentamente sobre su regazo,
levantándose sobre sus rodillas extendidas por encima de él.
—Voy
a estar dentro de ti—, dijo Yunho, en voz alta como si sólo ahora
lo aceptara.
Su
eje sobresalía por la anticipación, la corona casi encuentra su
agujero.
—¿Cargado
para el oso una vez más?—Jae bromeó, haciéndolo sonreír
abiertamente de nuevo.
—Realmente,
de hecho, vine cargado para el oso—. Se acercó con mucho cuidado
rozando sus colmillos a lo largo de su cuello. —Solamente para
encontrar una mariposa.
Jae
se estremeció. Podía ser tan encantador, tan seductor cuando quería
serlo.
—Quiero
besarte, Jaejoong. Jae se inclinó hacia delante con impaciencia para
presionar sus labios contra los suyos.
Pero
Yunho tomó la iniciativa, poniendo su espalda en su brazo. Con sus
labios encima de los suyos, lo forzó a aceptar los empujes fuertes
de su lengua, hasta que esto se parecía al sexo..., como si él
estuviera follando su boca con la lengua.
Dio
un grito en contra de sus labios cuando él sumergió un dedo en su
agujero desde atrás, empujando al mismo tiempo que su beso. Cuando
él acuñó un segundo dedo dentro, Jae pensó, “Me está
preparando”.
Una
y otra vez, él besó y empujó... más fuerte. Más áspero. “No,
él me advierte”.
En
cambio esto prendió fuego a su imaginación. Había visto su manera
de moverse, ¿qué más podría hacer con ese pecaminoso cuerpo suyo?
¿Cuáles eran esos impulsos de los que él seguía hablando?
Jae
y Yunho habían tenido algunos momentos de tocar-y-terminar juntos,
pero siempre seguidos del éxtasis.
Cuando
lo liberó de su beso, estaba sin aliento, en una bruma de deseo.
—Estoy
listo, Yunho. Él le había dicho que la frase pactar con el diablo
vino de él; Jae se sentía como si estuviera a punto de vender su
alma.
—Realmente
confías en que no te hare daño.
—Yunho sacudió la cabeza con
fuerza, preguntando exactamente cuando había accedido a reclamarlo.
Antes,
le había dicho que él era como un golpe bajo. Ahora él se dio
cuenta que nunca podría dejar de dejar de tambalearse.
Pero
no había vuelta atrás a partir de esto. Incluso un hombre mejor que
él haría cualquier cosa para poseer a esta hermosa criatura —con
su piel melosa y su sexy línea de bronceado, con su largo cabello
que cosquilleaba sus pezones. Esos ojos negros ardientes…
Mucho
menos un vampiro que había codiciado a su pareja durante siglos.
—En
verdad confío en ti, Yun. Tú eres mi tipo, —murmuró, mirando
hacia él a través de sus pestañas.
—Vas
a cuidar de mí esta noche.
—¿Cómo
podían sus palabras hacer que su pecho se sintiera oprimido?
¿Hacían
que tratara desesperadamente no hacerle daño?
—Entonces
no puedo tocarte. —Entrelazó sus dedos detrás de su cabeza.
—No
hasta que sepa que puedo pasar por esto.
—Lo
haces sonar como si fuera una dura prueba.
—Lo
será. —Lo único que sé es que estas por tu cuenta.
—Está
bien. Puedo hacer esto. ¿Qué tan difícil puede ser?
—Como
follar acero.
Jae
arqueó una ceja. —Entonces somos una pareja perfecta, porque en
este momento estoy caliente como una fragua.
—Llevándolo
de la mano lo acarició lentamente, arriba y abajo...
arriba… abajo, dejando su control irregular.
Apenas
reconociendo su voz, Yunho le dijo, —Comienza esto, Jaejoong. Móntame.
Mordisqueó
su labio y cabeceó, bajándose a sí mismo sobre él.
Cuando
la punta de su miembro se encontró con su agujero húmedo y suave,
casi se derramó contra su apertura. —Dios todopoderoso, es
apretado.
Jae
abrió sus rodillas, pero sólo fue capaz de tomar la cabeza en su
interior.
—Yunho,
por favor... Si él sujetaba fuertemente sus caderas, lo llevaría
abajo sobre su longitud, rasgando su carne sensible.
Apretó
sus dedos entrelazados hasta que pensó que sus huesos se romperían.
—Estas...
haciéndolo... muy bien.
—Él
dejó caer sus manos, apretándolas a sus costados.
Una
vez más, amplió sus rodillas, pero Jae fue atrapado rápidamente.
—No
consigo ir más abajo. Oh, Dios, necesito ir más abajo.
Yunho
dijo entre dientes, —¿Y cómo habías planeado tomarme?
Jae
parpadeó. —Pensé que solamente me deslizaría hacia abajo.
—Entonces
necesitaré que estés resbaladizo, te necesitaré goteando.
—Se
echó hacia atrás para contemplar sus pezones hinchados. Justo ante
sus ojos, un rubor irradió sobre su suave piel, burlándose de él
en todos los sitios en donde podría perforarlo.
—Acerca
tus pezones hasta mi boca.
Cuando
lo hizo, le sostuvo la mirada mientras acariciaba un pezón.
Cerrando
los labios sobre él, lamió la punta...
—¡Yunho!
—Cuando él comenzó a succionar, Jae se onduló, trabajando para
empalarse a sí mismo. Agonía. Sentía que explotaría, segundos
después de bombear en él con sólo la corona dentro. Con un gemido,
perforó su pezón, con un pinchazo diminuto de su colmillo, la
sangre manaba a su lengua choreando. ¡Delicioso! ¿Alguna vez
tendría bastante de él?
Jae
gritó. ¿De dolor? No, él arqueaba su espalda. —Yunho, chupa más
fuerte.
Él
lo hizo, hasta que la succión sobre su pezón casi lo sostuvo en
posición vertical.
Cuando
se forzó a detenerse, Jae gimoteó, a toda prisa acercó el otro
pezón para tentarlo de nuevo.
—Aquí.
Él
robó otra probada. Contra su pecho, con la boca humedecida por su
sangre, con voz áspera dijo, —No puedo tomar más.
Agarrándose
de sus hombros, Jae refunfuñó, —Ni yo tampoco.—Aún no lo había
penetrado. —En realidad eres demasiado grande.
Jae
comenzó a arrastrarse fuera de él.
¿Alejándose de mí?
Sus
colmillos se pusieron aún más afilados, sus instintos tomando el
control...
"Teletranspórtate
a la cama", "sujétalo debajo de ti".
"Toma
su sangre, inúndalo con tu semilla".
Yunho
agarró su cintura diminuta, atrapándola, únicamente impidiendo que
sus garras se clavaran en su piel. —Ah ah, Jaejoong.
—¡Nosotros
no encajamos!
—Lo
haremos. No te dejaré ir hasta que te haya reclamado. —
Perdóname.
Sus
caderas se resistieron, haciéndolo rebotar sobre su eje, lo levantó
con los brazos, luego lo deslizó hacia abajo.
—¡Yunho!—Su
voz era una mezcla de dolor y deseo. —¡Déjame ir!
—No.
Porque ahora, no eres… —otro corcoveo de sus caderas
—aún… —un impulso más contundente —¡Mío! —gruñó al
mismo tiempo que tocaba la parte superior de su agujero.
Con
un grito ahogado, Jae deslizó su cabeza hacia adelante, su cuerpo
tembloroso contra su pecho agitado.
—Mírame.
¿Te hice daño? —preguntó, haciendo caso omiso de las voces en su
cabeza, que clamaban, "entiérrate en él, reclámalo, hazle entender
quien lo marcará. Quien lo dominará".
Jae
mordió su labio, con expresión cerrada. —Esto me dolió un poco,
Yun.
¡No,
nunca hacerle daño! Él se sacudió, interiormente cantando,
Endgame. Endgame.
Jaejoong
como mi pareja. No puedo asustarlo. El nunca sabría la batalla en su
interior cuando Jae empezó a maniobrar sobre su eje. Yunho extendió
sus dedos a través de su culo, sintiendo el movimiento sensual de su
carne mientras Jae ponía a prueba su cuerpo, con su ajuste perfecto.
¡Mierda,
él palpitaba en su interior! ¡No, contrólate a ti mismo! Yunho
rechinó sus dientes, el sudor humedecía su piel. Cuando Jae dio
un contoneo cauteloso con sus caderas, ambos se encontraron
con la mirada, preguntándose cómo reaccionaría Jae.
Sus
parpados se entrecerraron... un gemido escapó de sus labios.
Se
estremeció en respuesta. La realidad lo golpeó: estaba
viendo a su compañero—su—descubrir de este placer por primera
vez. La idea lo satisfizo de un modo que no podía describir.
Cuanto tiempo he esperado esto, esperado por él.
—Ahora
sólo se siente mejor y mejor. —Jae tocó su frente con la suya.
—Bebé, puedo sentir los latidos de tu corazón dentro de mí.
Pronto
en más de un sentido. —Nunca podrás dar marcha atrás, Jaejoong.
Te he reclamado para mí. —Pero no por completo. Él todavía
tenía que morder su cuello. Ritual. La marca era un signo de esta
reclamación, el sello entre ellos.
"Hunde
tus colmillos en él. Hazlo retorcerse sobre ellos también".
Justo
cuando sus ojos se clavaban en el punto pulsante de su cuello, Jae
susurró,
—Nunca
pensé que podría ser así. Yunho, nunca me he sentido tan cerca de
otro.
Arrastró
su mirada hasta la suya. Con voz gruesa, él admitió, —Yo tampoco.
Jae
sonrió. —Bien.
No
le hagas daño. Sólo ternura. No lo asustes.
Esta
noche, Yunho, no serás un vampiro con él.
En
ruso, le dijo, —Pequeño mortal, has cambiado todo.—¿Puedo
quererte tanto? ¿Para negar lo que soy?
Porque
sentía algo más fuerte por Jae —un profundo sentimiento de
posesividad hasta los huesos, de protección.
Nadie
alguna vez dañaría al hermoso ser en sus brazos, ni siquiera él
mismo.
Santa madre de los vampiros!
ResponderBorrarControlarse debe ser tan duro para Yunho... y Jae cayendo lentamente ennsu propia "trampa"~
Por fin por fin yunho a reclamado a jae y que termine el ritual y no abra quien los separe jamas ni el mismísimo ren
ResponderBorrarGracias me encanto
waaa que hermosooooooooooo, T.T fue tan TIERNO Yunho por fin lo admites claramente, lo ameeee simplemente ame este cap
ResponderBorrarmuchas gracias
besos
Aaaaaah!!!! Fue genial!!! Al fin Yunho reclamo a Jaejoong como su noviooo >. < ♡ soy tan feliiiiz~ gracias por el capítuloooo :-)
ResponderBorrarOMG!!! Por fin... ;)
ResponderBorrarSi Yunho desaste de Ren y reclama a Jaejoong como tu pareja!!!
Gracias por la actualización Gaby <3
Waaaaaaaaaa que emoción al fin al fin sucedio....
ResponderBorrarY he de admitir que fue muy lindo y romantico por favor estos dos se aman con locura.
Gracias por el capítulo me encanta
Bechitos
😘😘😘😘😘
Por fin lo admites que es tu novio wooo tambien ya era hora pues Yunho ...
ResponderBorrarel pobre si que se esta controlando porque lo ama kyyaa ambos tiene que ser mas tierno >o<
Graciaas
Por más cachondo que sea el capítulo, se me hizo tan tierno!! Yunho ppr fin reclamó a Jae!! Y yo lloro de felicidad!! Y más porque hasta piensa en que puede renunciar a ser vampiro!!! Eso es genialoso!!! TuT
ResponderBorrarJajajaja, pongan el nombre que le pongan a su relación y le busquen, al final Jae es de Yunho y Yunho de Jae, asi que no te metas Ren.
ResponderBorrarGracias
Eso es eso me gusta me encanta como avanza hahah XD
ResponderBorraruyyyy, ahora sí ya está todo puesto en la mesa como se dice comúnmente...
ResponderBorrarYunho sigue siente un ser que lucha constantemente con él mismo , sabe que es muy fuerte al lado de Jae y por eso se contiene tanto.
me mató la parte de Jae cuando dice lo que una mariposa puede montar a un caballo perezoso. Mi Dios bendito, imagino que la cabeza de Yunho se fue a la luna y volvió de excitación... y no solo una cabeza, sino dos. jajajajajaja.
también me mata de dulzura cuando Yunho en ruso le dice -mi pequeño mortal....
moriré de un coma diabético con estos dos super cachondos y enamorados.
gracias Gaby por este capítulo
sé del trabajo que estas haciendo con traer todos los días un capítulo nuevo y eso se agradece enormemente.
Oh por fin! Creo que llorare que bello....por fin Yunho se dio cuenta de su amor por Jae. ..oo Ren tragate esa bitch. ....
ResponderBorrarPor finnn!!! .ambos se entregan por el amor que sienten^~^*~* ....YH no permitira que lastimen a su parejaa ,me fascino este capitulo
ResponderBorrarwow ya era hora que esos dos se pertenezcan en mas de un sentido. Yunho debes encontrar la forma de evadir esa tonta promesa que hiciste por el bien de Jae y de ti mismo.
ResponderBorrarAww me encanto el final de este capitulo... Pero a ver si es cierto que ni el mismo va a dañarlo ¬¬ por que yunho tiene cada arranque...
ResponderBorrarPor fin paso, aunque falto la mordida para completar el ritual
Ahora que hara Ren la proxima vez que se levante, no creo que se quede cruzado de brazos, espero que Yunho sea mas inteligente que el esta vez
Hermoso hermoso hermoso....gracias
ResponderBorrar