Capítulo
8
—¿Por
qué ahora?
Gruñó
Junsu, mirando hacia abajo donde Yunho yacía inconsciente en el
sofá.
Después
que nos fuimos por todos los problemas. Jaejoong evitaba
mirar a Yunho. Cuando lo hizo, su ritmo cardíaco se elevó
y se le corto la respiración. Jaejoong debería haber
sabido mejor que si se mantenía cerca a su alrededor, por un
momento más de lo necesario... Cada segundo que pasaba con él, lo
hacía más vulnerable.
Cuando
él lo vio con fuego en sus ojos, su cara impresionante
se endureció, por el puro deseo de un compañero mortal,
había sentido una aceleración en la sangre y un anhelo
terrible por su contacto.
El
suave deslizamiento de su lengua y el agarre de su mano en su cabello
le habían movido algo
aterrador en su interior, la necesidad de someterse y
rendirse, así como abandonar todo por él. Se aclaró la
garganta.
Él
se estaba volviendo demasiado apegado a mí. Rain pasó su mano por
la mandíbula,
estudiándolo.
—No
importa, Junsu.
—Ya
está hecho.
—¿Debo
llevarlo al Arcángel, Jaejoong?
—¿O
prefieres hacerlo tú?
Gratitud
lo inundó por su intervención. En lo que a él se
refería, no tenía sentido la discusión de todo esto aún
más. No podía cambiar las decisiones que había hecho o cómo
reaccionar a ellas. Sólo podía seguir adelante.
—Si
tú, me haces el favor, Rain.
—Te
lo agradezco.
—Ya
he llamado a Yoochun y discutido con él. Está en Las Vegas, pero él
ha hecho arreglos para
que Yunho sea recibido en sus oficinas en Los Ángeles.
Junsu y yo, nos
quedaremos
aquí con Yoona, para ver si el olor de Yunho agita a cualquier
cosa a salir.
—Está
bien.
El
ángel pelirrojo se inclinó y recogió el cuerpo laxo de
Yunho, lanzando al mortal por encima de su hombro.
—Te
llamaré una vez que lo deje y vea si tu quieres que yo vuelva aquí
o regrese a Seúl.
Le
tendió la mano, y Jaejoong tocó el brazo de Rain.
—¿Podrías
comprobar y asegúrate de que no se pierda nada en su
mente? —
Rain
encontró su mirada, sintiendo su propia compasión. El asintió
con la cabeza.
—Voy
a hablar contigo pronto.
Jaejoong
sabía que su petición lo había traicionado. Si no se hubiera
puesto en peligro, no temería perder un trozo de sí mismo, detrás
en los recuerdos de Yunho.
Así
las cosas, no podía estar seguro de que no tenía y
necesitaba la certeza de saber, que todo recuerdo único e
impresión de él fuera aniquilado por completo de su mente.
Yunho
necesitaba un nuevo comienzo, sin ninguna posibilidad de que
inadvertidamente pudiera recordarlo.
Cuando
la puerta se cerró detrás de Rain, miró a Junsu.
—¿Dónde
está Yoona?
—Abasteciendo
la camioneta.
—Ella
debería estar de vuelta pronto.
—Vamos
a salir cuando regrese. Junsu se cruzó de brazos, levantando la
barbilla con
terquedad.
—¿Estás
bien, Jaejoong?
—¿Qué
pasa si no lo estoy? Replicó él-, cansado de su auscultación e
insistencia.
—Si
tú deseas llamar a Changmin sobre mí, sólo hazlo.
—No
estés molesto. Sólo estoy preocupado por ti.
—¿Por
qué lo complicas? Se acabó. Sólo quiero olvidarme de
eso. Dejó escapar un
suspiro
audible.
—Mi
opinión es que no es tan fácil de conseguir tener
sentimientos. Changmin nunca se recuperó.
—Pero
sigue siendo eficaz, ¿no? Todavía hace lo que hay que
hacer. Su dedicación no se ha quedado atrás y tampoco la mía.
—Está
bien, está bien. —Junsu levantó sus manos en señal de
rendición.
—Yo
estoy aquí para ti, si necesitas hablar de ello. En
realidad, me gustaría que lo hicieras. Tengo curiosidad.
—Jaejoong arqueó una ceja ante él.
—¿No
dicen que la curiosidad mató al gato?
—Yo
no soy un gato.
—No,
tú eres un dolor en el culo. Jaejoong se volvió hacia la puerta al
abrirse y Yoona caminó hacia adentro.
—Vamos.
Necesito cazar.
* * * *
Heechul
se subió a un taburete junto a Jaejoong y murmuró:
—¿Quién
sabía que los licántropos eran mucho mejores en la caza que
nosotros?
Jaejoong
levantó la vista de la muestra de sangre Lycan que estaba
estudiando para encontrarse con la mirada desalentada de su
compañero Centinela.
—¿Todavía
no hay suerte?
Habían
pasado tres días y Junsu, Rain, y Yoona no tenían nada que mostrar.
Heechul recorrió la mirada en el laboratorio.
—¿Has
visto mis sugerencias, sobre cómo podemos conservar algunos de los
sujetos vivos,
mientras
más conscientemente?
—Sí,
lo hice. Señalaste algunos cambios que no había pensado. Gracias.
—Has
estado distraído. —Heechul frotó los dedos, ausentemente en la
mesa de aluminio.
—¿Lo
echas de menos?
—¿A
quién? —Pero él sabía y miró hacia el microscopio para
ocultar su rostro.
Sí,
echaba de menos a Yunho. Lo echaba de menos en la enfermería, donde
había ayudado a
sacar sangre y reponer líquidos por vía intravenosa. Lo
echaba de menos en el
laboratorio,
donde sus comentarios y preguntas sobre las muestras habían
despertado unas teorías e ideas.
Perdidos
en su habitación, donde había sido una gran resonancia para
él y algo muy bonito de ver. . .
Tan
poco tiempo y sin embargo, habían compartido tantas cosas.
—¿Sabes
quién?
—Al
mortal. Yunho.
—Espero
que él esté bien, murmuró, con la mirada fuera de foco
cuando la soledad, ya familiar, le pesaba sobre su estado de
ánimo.
Nunca
se había sentido solo en toda su existencia hasta ahora.
Jaejoong no podía entender cómo era posible que se sintiera
de esa manera, cuando él tenía tan a menudo, la compañía
de sus compañeros Centinelas.
Sin
duda se lo merece.
—Me
gustaría salvar a alguien de esa manera. Que ha pasado por todo.
Tú sabes, desde
el
momento en que lo encontrara, hasta el momento en que esté listo
para volver a vivir su vida terrenal.
Jaejoong
levantó la vista otra vez. La diferencia entre él y
Heechul en ese momento, era tan solo que Jaejoong estaba
sacudida por él. Heechul era todavía puro de propósito,
casi infantil en su incapacidad para percibir o sentir empatía con
las emociones.
Eso
lo puso a pensar en lo mucho que había cambiado Jaejoong y
el tiempo, en que esta alteración progresiva, debería haber
venido ocurriendo.
Las
grietas que se han estado formando desde hace siglos. Yunho
se había simplemente deslizado en una con la precisión de una
cuchilla afilada, la ampliación de esas grietas y hacerlas
aún más susceptibles a su efecto potente sobre Jaejoong.
—¿Por
qué me miras así? —Preguntó Heechul.
—Lo
siento. Mi mente vagaba. —Heechul frunció el ceño.
—Creo
que es genial, tú sabes, ayudarle a un mortal, porque lo
hiciste directamente. He pasado mucho tiempo pensando, si estamos
haciendo alguna diferencia en absoluto.
El
teléfono celular de Jaejoong comenzó a sonar y él lo sacó del
bolsillo de sus pantalones.
Vio
el nombre en la pantalla y respondió:
—Hey,
Geun Suk. ¿Cómo estás?
—Tan
bien como puede esperarse bajo las circunstancias.
La
voz de Geun Suk era confidente y suave, era una de las
cosas que siempre había admirado sobre el segundo comandante de
Changmin, que nunca se irritaba.
—¿Estás
todavía en busca de vampiros no infectados?
—Sí.
¿Quién sabía que serían tan difíciles de encontrar?
—Esa
es la pregunta que nos hemos estado haciendo recientemente. Ha estado
muy tranquilo desde que los licántropos se rebelaron. Jaejoong se
enderezó.
—Eso
no suena bien.
—Probablemente,
no. En el ínterin, tengo tres vampiros aquí en Punto Ángel.
Pensó
en la casa de Changmin, Punto Ángel, un compuesto, en las
colinas de Anaheim, que servían de cuartel general para todos
los Centinelas.
La
unidad estaba a sólo unos pocos minutos al pie de la Torre
de Gadara, donde el arcángel Yoochun tenía todas sus
operaciones. Y donde Yunho se había ido.
Pero
probablemente no estaba allí. Probablemente había sido
absorbido por la red de Yoochun y enviado a cualquier lugar,
como un soldado médico, donde fuera más necesario.
Yoochun
tenía sus propias batallas que luchar, después de todo.
Sin
embargo...
—Los
pondremos boca abajo, — dijo Jaejoong, mirando el reloj.
—Te
veré a las dos.
—Vamos
a estar esperándote. Jaejoong —colgó y se preguntó qué
debería ponerse.
Su
estilo militar habitual no sería lo apropiado, si él iba a salir
en público.
—¿Adónde
vas?, Preguntó Heechul.
—A
Punto ángel, a recoger algunos vampiros. —La cara del Centinela
se iluminó.
—Iré
contigo.
—Grandioso.
Jaejoong se dirigió hacia la puerta.
—Saldremos
en quince minutos.
Jaejoong
salió de la carretera principal y comenzó el viaje en auto
hasta la ciudad en las colinas, donde Punto Ángel esperaba. La
distancia entre las propiedades, era una extensa ladera ampliada,
la más alta que subía hasta llegar a una puerta de
hierro forjado que dividía la carretera, cortando el acceso al
público.
En
una losa de granito difícil de mover, estaba grabado:
PUNTO ANGEL, lo que podría parecer dar la bienvenida, a no ser
por la puerta de entrada y el Lycan grande en forma humana, que
salió de ella.
Fue
capaz de reconocerlo inmediatamente, debido a su tamaño
demasiado grande como para ser aerodinámico y sus ojos verdes
eléctricos, que venían de la sangre de demonio que corría por sus
venas.
Sabiendo
que tenía que aprender de sus errores anteriores, bajó la
ventana de la
camioneta
que él conducía de Aeronáutica Park.
—Hola,
—le saludó.
—Es
bueno verte.
—Me
alegro de que estés aquí. —Él parpadeó, claramente
sorprendido por la cortesía inusual de un Centinela.
—Gracias
por volver, —dijo Heechul.
—Oh…
está bien. Seguro.
Se
veía desconcertado y cauteloso, desapareció en la puerta de
entrada y la puerta empezó a abrirse. Les ofreció incómodamente,
que pasaran.
Jaejoong
manejó una milla de distancia hasta la casa, sus ojos
buscando la ladera de los licántropos en forma de Lycans y
vio sólo a unos pocos, en lugar de las decenas que
normalmente salpicaban el paisaje.
Completó
el camino circular y se estacionó frente a la entrada a la casa de
Changmin.
—Todavía
no puedo superar la diferencia de este lugar sin los
Lycans, dijo Heechul
mientras
saltaba fuera de la puerta del pasajero.
—Esta
tan vacío y silencioso.
De
esa forma Jaejoong se había sentido desde que Yunho se
había ido, pero se mantuvo en silencio y en su lugar volvió la
atención a la casa.
La
residencia estaba construida a un lado del acantilado en tres
niveles, cada uno con su propia cubierta envolvente de ancho
revestimiento de madera, terrazas de roca y las vigas de
madera habilitadas en la casa para integrarse en la ladera.
PUNTO
ÁNGEL, había aparecido en numerosas revistas de arquitectura
y había sido el foco de atención de un especial de televisión,
hablaban de extravagantes casas, respetuosas del medio ambiente.
Todo era parte de la estrategia de Changmin para darles un
mensaje a los vampiros.
—Estoy
aquí.
—Vengan
por mí.
La
mitad de la puerta doble se abrió cuando se acercaron y
Geun Suk llenó el umbral. Su hermoso rostro estaba impasible
como siempre, sus ojos vigilantes y su aura tan oscura como
su pelo manchado de tinta.
Él
era un Ángel, al que valía la pena tener a tu espalda...
A
menos que te molestara eso. Era implacable en todo, desde
la fuerza de su amistad, hasta la facilidad con la que cortaba a
sus enemigos.
—Jaejoong.
Heechul, —les dio la bienvenida.
—Tienes
un Lycan en la puerta, —dijo Jaejoong.
—Más
y más se rezagan todos los días. Parece que no todo el mundo estaba
contento con
el
status quo.
—¿Y
cómo esta Changmin? —La cabeza de Geun Suk se inclinó hacia
un lado, pensándolo.
—Hmm…
Estable, diría yo.
Changmin
había tenido conflictos sobre su amor por eones. Estar ¨estable¨
era un regalo para él y para todos los Centinelas.
—Eso
es bueno, dijo Jaejoong.
—El
momento no podría ser mejor.
—Me
sorprende escucharte decir eso. Ara es una gran vulnerabilidad.
—Lo
sé.
—Jaejoong
tiene su propio mortal, intervino Heechul.
—Él
entiende a Changmin mejor que nosotros.
—Sé
que lo hace.
La
mirada de Geun Suk se quedó en la cara de Jaejoong, cuando él le
tendió la mano y le dio un sobre. Lo tomo y rompió el sello.
Había fotos de la hermana de Yunho y su familia,
incluyendo dentro fotos de su amor.
—Las
conseguiste. Gracias.
—Más
adelante las entregas, —dijo el sin alterarse.
—Los
vampiros siguen aún en camino para Anza, por lo que tienes algún
tiempo—.
Jaejoong
frunció el ceño, confundido.
—Junsu
me dijo acerca de tu situación, explicó.
—Yo
entiendo que necesites ver al hombre. Necesitas asegurarte
de que está haciéndolo bien y que no te recuerda. Así
que ve. Cuando hayas terminado, quizás tú también estés
estable.
—Gracias,
Geun Suk.
—Estoy
aprendiendo a adaptarme a los Centinelas y sus dilemas mortales.
Una
ligera curvatura de sus labios lo hizo darse cuenta del
impacto que Ara, estaba
teniendo
en todo el mundo.
—Jung
Yunho no sabe de ti,— le advirtió.
—Estate
preparado para eso—. Se quedó sin aliento, con el golpe de
comprensión.
—¿Lo
has visto?
Él
lo vio a los ojos y se preguntó, qué si Junsu le
hubiera dicho de su “situación”.
Fuera
lo que fuese, Geun Suk se había tomado la molestia de ver por sí
mismo que de la mente de Yunho, hubiera sido completamente
borrado, todo rastro de Jaejoong.
Geun
Suk hizo un gesto a Heechul para entrar en la casa.
—Jung
está dejando California hoy en día, Jaejoong. Yoochun lo
va a pasar a la
escuela
de medicina.
—Bien.
Eso es bueno.
Eso
significaba que la vida de Yunho estaba de regreso donde
había estado antes de ser secuestrado, por lo menos
considerando que su familia y amigos creían que estaba
muerto. Dejo salir una respiración.
—No
será por mucho tiempo. Heechul le ofreció una sonrisa alentadora.
—Lo
veras, cuando este de regreso.
—¿Será
posible que regrese? — Jaejoong se preguntó.
Regresando
al Centinela que había sido antes, de que él hubiera
encontrado que era capaz de hacerlo sentir una capacidad mortal...
¿Sentirse
humano?
¿Todavía
quería eso?
Tal
vez no había vuelta atrás para Jaejoong.
Status
quo es una locución latina, que se traduce como «estado del momento
actual», que hace referencia al estado global de un asunto en un
momento dado.
así que Junsu fue el que le quito los recuerdos a Yunho y por eso Jae sufre pero creo que aun no recuerde a Jae si lo ve se volverá a enamorar de el como a el inicio que lo vio por primera ves
ResponderBorrarGracias por compartir
No, no fue Junsu, el que le quitó los recuerdos a Yunho fue Jae.
Borrarahora deber verlo de nuevo?? y con eso Yunho no se enamorará otra vez de Jae al verlo??
ResponderBorrarse me está complicando un poco entender bien la situación.
lo único que sé es que Jae está sufriendo mucho .
gracias por la actu
Jae le quitó los recuerdos a Yunho, no debe verlo de nuevo, pero QUIERE VERLO DE NUEVO, aunque no sabe porqué, Puerto Ángel es como una base militar asi que es gigante, podría no verlo, pero Jae se quiere asegurar con sus propios ojos de que está bien y porque aunque no lo quiere reconocer lo echa de menos.
BorrarLo que pasa es que Jae como no sabe que es el sentimiento de amor de pareja, pues no sabe definir lo que siente por Yunho, solo sabe que quiere verlo de nuevo, y el fue el que le quito sus recuerdo a Yunho cuando se dejo dar el beso.
ResponderBorrarGracias
Pobre Joongie... no sabe lo que siente... Pero quiere asegurarse de que Yunho esta bien :3
ResponderBorrarVoy a seguir leyendo... ^^
No le había puesto atención a la historia de los laycans pero creo que también es muy interesante... Soli espero que jj pueda soportar que yunho no lo recuerde u.u gracias por el cap!!
ResponderBorrarPobre de Jaejoong u.u será dificil para él encontrarse con Yunho y que este ya no le recuerde xd es tan protector con Yunnie, me encanta eso, es muy tiernoooo :3 espero que se reencuentren pronto! te agradezco mucho el capítulo, seguiré leyendo :)
ResponderBorrarYo sè qe Jaejoong y Yunho volveran a encotrarse
ResponderBorrarTal vez Yunho no tenga los recuerdos mentales, pero el cuerpo nunca olvida
Ademas de que Jae si recuerda ;_;
Serio muy duro para Jaejoong tambien aunque el sienta algo pero recuerda todo en cambio Yunho no pero yo creo que si se vuelven a ver ese sentimiento volverá a Yunho quien sabe voy a seguir leyendo
ResponderBorrarYa quiero que lo vea.....aunque Jae va a sufrir.....pero estoy segura que Yunho se enamora de Jaejoong a simple vista....no importa si no lo recuerda...
ResponderBorrarAww jae se siente vacio sin yunho
ResponderBorrarComo sera el reencuentro, como yunho sera capaz de recuperar sus memorias?
Aww jae se siente vacio sin yunho
ResponderBorrarComo sera el reencuentro, como yunho sera capaz de recuperar sus memorias?
Aww jaejoong se siente solo sin yunho
ResponderBorrarComo sera el reencuentro de estos dos
Y como yunho recuperara sus memorias ??
n.n
Aww jaejoong se siente solo sin yunho
ResponderBorrarComo sera el reencuentro de estos dos
Y como yunho recuperara sus memorias ??
n.n