Capítulo
5
Yunho
se acercó a los monitores en color y golpeó los nudillos contra
el marco del LCD.
—¿Tiene
algo que ver que sean vampiros para que se vean en blanco y
negro? ¿Es cómo
lo
de ser invisible en los espejos? —Era extraño mirar las líneas
intravenosas de color rojo
fuerte
conectadas a unos cuerpos grises—. ¿ Y por qué
desperdicias la sangre buena en ellos?
—En
primer lugar, en realidad son de ese color, totalmente
grises de pies a cabeza. No todos los vampiros son así. La
mayoría de ellos pasan como mortales. Estos chicos y chicas están
infectados por una enfermedad.
Yunho
echó un vistazo hacia donde Jaejoong estaba, encaramado en un
taburete de metal con las manos en las rodillas, pareciendo
adorablemente serio y locamente atractivo.
¡Que
disparate!, porque era un ángel, por Dios. Los ángeles no
estaban destinados a ser objetos sexuales. Yunho estaba muy
seguro de que, incluso el poner « ángel» y «sexo» en la misma
frase era un pecado grave por su parte.
—En
segundo lugar —continuó—. No intento salvar sus culos. Trato
de salvar el mío y
el
de mis compañeros, los ángeles centinelas. Mi sangre te
curó, porque cura mortales.
También,
por desgracia, cura a estos chicos. Aún no lo han
descubierto, pero lo harán. Cuando lo hagan, tenemos que tener
una cura viable en la mano para mantenerlos a raya.
Estamos
seriamente en inferioridad numérica. Si empiezan a cazarnos,
sería una mala noticia. No sólo para nosotros, sino para
todos en el planeta. Mantenemos a los vampiros bajo control.
—¿Bajo
control? —Yunho se cruzó de brazos—. Quieres decir,
¿sacrificándolos?
—Cazamos
a los astutos, sí. Los que plantean el peligro más
grande para los mortales.
—Jaejoong
sacudió la cabeza, deslizando los elegantes extremos negros
de su pelo corto por su mandíbula—. Sé que estás
pensando que deberíamos dejar que se mueran todos de la
enfermedad. Pero aniquilarían a la población mortal antes de
quedarse sin comida.
—¿Por
qué no sólo matarlos a todos, como lo hiciste la otra noche?
—Bueno...
—le contó una historia sobre los Ángeles Vigilantes que
cayeron en
problemas
y se convirtieron en vampiros—. No podemos tomar a los
Caídos o Fallen, pero podemos…
—¿Por
qué no? —Yunho le interrumpió.
—Su
penitencia es vivir con lo que se han convertido.
—Él
soltó un bufido.
—¡No
es una dura penitencia cuando están pasando un maldito buen rato!
—Los
vampiros que te tomaron cautivo no eran los Fallen. Eran
minions, Yunho,
humanos
que fueron convertidos en vampiros por los Fallen. Podemos
matar a los
minions
y lo hacemos, pero el origen del vampirismo está en los
Fallen, que es igual que tratar los síntomas pero no la
enfermedad.
—Así
que todo lo que me pasó...
¿Todo
comenzó porque algunos ángeles lo jodieron de alguna manera?
¿Sólo
soy un daño colateral?
Yunho
bajó la mirada.
—Lo
siento, Yunho.
—No
vuelvas a pedirme disculpas —dijo con suavidad, yendo hacia
Jaejoong.
Le
tomó las manos y las apretó, maravillándose de lo
delicadas que eran , cuando sabía que seriamente podían patear
cualquier culo.
—Jaejoong.
Las
emociones lo inundaron cuando lo tocó... gratitud y culpa,
afecto y admiración, reverencia y pura necesidad. Pero a
través de todo eso, una cosa permaneció sumamente clara,
sentía que tocarlo era lo correcto.
Como
si hubiera estado esperándolo toda su vida para hacerlo. Y
Jaejoong sintió algo de esto, estaba seguro. Estaba ahí, en la
suave captura de su aliento, en la separación de sus labios, en la
confusión que llenaba sus ojos hermosos.
—Yunho,
has pasado por una experiencia terrible —dijo Jaejoong en
voz baja, vacilante—.
Es
natural que te sientas un poco conmocionado conmigo.
—Eso
no explica lo que tu estás sintiendo a cambio. Replicó Yunho.
—Yo
no experimento emociones como lo haces tú. No fuimos
creados de ese modo.
—Yunho
tomó su cara entre las manos, acariciando sus pómulos con los
pulgares.
—Tú
sientes algo por mí, Jaejoong. Lo sabes. Lo sé. —Se abrió la
puerta detrás de él y Jaejoong se alejó con aire de culpabilidad.
—Está
bien, así que aquí es… —la voz de Heechul se
desvaneció—. ¿Va todo bien,
Jaejoong?
Yunho
se dio la vuelta y se dirigió hacia Heechul, dándole a Jaejoong la
oportunidad de recobrarse.
—Eso
huele increíble —dijo Yunho, asegurándose de que mantenía
la atención de Heechul en él—. Esperemos que recuerde como
se come.
—Estoy
seguro de que eso volverá a ti —dijo Heechul secamente—. Al
parecer, a los mortales les encanta comer.
—Es
uno de los simples placeres de la vida . —Levantó un taburete
junto a él y empezó a
desempaquetar
la gran bolsa de plástico llena de alimentos.
—¿Cuáles
son algunos de los otros? Preguntó curioso Heechul.
—Bueno,
eso es diferente para cada persona. El género desempeña
un papel, también .
—Quitó
la tapa del cubo de pollo y sacó un muslo,
engulléndoselo, ya que su boca se hacía agua.
—Para
los hombres diría que la comida, los deportes competitivos
y el sexo en la parte superior de la lista.
Sacudiendo
la cabeza, Heechul dijo:
—Lo
simple es correcto.
Yunho
arrancó un pedazo de pollo grasiento con los dientes y
gimió cuando explotó el sabor en su boca. Sus glándulas
salivales se hicieron presentes y estaba bastante seguro de sus
ojos en blanco en su cabeza.
Volver
a comer después de un año para Yunho era un verdadero placer.
—No
puedo creer que estén aquí en la tierra y no disfruten de la
cocina.
¿Con cocina te refieres a alimentos de una calidad excepcional?
Yunho
se rió de la mirada escéptica que Heechul disparó a su cubo de
piezas de pollo frito.
—En
realidad estaba pensando en la receta de pollo frito de mi
madre.
—Jaejoong
se acercó y tocó ligeramente sus bíceps.
—Voy
a hacer la ronda. Vuelvo en un rato.
-¿Quieres
que vaya contigo? —preguntó, tomando una servilleta.
—No.
Necesitas comer.
Su
toque logró mantener a raya la ansiedad que empezaba a edificarse en
la cabeza de Yunho ante la idea de que Jaejoong lo dejara, aunque
fuera por unos minutos.
—Heechul
se sentará contigo mientras estoy fuera.
—¿No
tardarás mucho? Preguntó nervioso Yunho.
Estaba
más que dispuesto a renunciar a la comida si iban a estar
separados durante un período de tiempo apreciable.
—Media
hora, tal vez.
Miró
el reloj de la pared, analizando brevemente la idea de los
ángeles viviendo el tiempo mortal.
—Está
bien.
—¿Me
estás cronometrando? —preguntó Jaejoong, con un pequeño
destello de diversión en sus ojos.
—Sí.
—Sonrió.
Si
podía estar divertido, también podría sentir otras cosas.
—Entonces
será mejor que me mueva.
Yunho
lo vio salir, tomando una profunda respiración cuando la puerta se
cerró tras Jaejoong y los primeros estremecimientos del pánico
le erizaron los pelos de la nuca.
—¿Estás
bien? —preguntó Heechul, llegando a poner una mano sobre
su brazo. Se
apartó
rápidamente, sintiendo su piel de gallina.
—Por
favor, no me toques. Dijo Yunho alejándose.
Yunho
frunció el ceño se sentía mal, pero su respiración era
demasiado rápida para
explicarlo
correctamente. Se tomó un momento para recuperarse, para
empujar el
recuerdo
de crueles y codiciosas manos y bocas de su mente.
—Lo
siento, Heechul. Es simplemente que... tocarme... No estoy
preparado todavía. —Su ceño se profundizó.
—Pero
si dejas que Jaejoong te toque.
—Creo
que él es el único que puede hacerlo. No es algo personal
contra ti, te lo juro. Creo que tendré problemas con
cualquiera que me toque, menos con Jaejoong. Al menos por un
tiempo.
—Pero
si dejas que te toque, puedo curarte para que ya estés preparado.
Yunho
lo miró, dándose cuenta de que su despiste era real. Él
no lo entendía. Pero entonces, quizá él no podría. Si nunca
había sentido la emoción.
¿Cómo
podría empatizar con lo que estaba pasando?
Y,
sin embargo Jaejoong podía. Había, por lo menos, una
pequeña chispa de humanidad en él.
—Jaejoong
ya me curó —dijo Yunho—. No sería capaz de comer esto si no
lo hubiera hecho.
—Sanó
tu cuerpo —calificó Heechul—. Pero aún no ha sanado tu
mente.
Hizo
una pausa con un bocado de ensalada de col levantada a mitad de su
boca.
—¿Cómo
iba a hacer eso?— Yunho lo miró con los ojos muy abiertos,
curiosos.
—Tocándote.
Podemos entrar en tu mente y borrar todas las memorias de
tus malas experiencias. Si no hay malas experiencias, no hay
trauma residual.
—Borrar
— repitió Yunho.
—Sí.
No reprimidas. Completamente desaparecidas.
—Bien.
—Masticando, pensó en ello—. Estoy seguro de que eso me
viene muy bien. —
Y
él no se opuso.
¿Cómo
podría ser si se quitara el miedo, que incluso ahora vibraba a
través de él?
Un
miedo que le golpeó en el momento en que Jaejoong salía de la
habitación, tanto ahora
como
antes, cuando se había vestido. Y la vergüenza.
No
sólo por lo que le habían hecho a él, sino por las
veces que había estado tanto tiempo solo en el pozo, que había
anhelado que los vampiros volvieran.
Las
veces que había sentido sus agonizantes mordiscos y el
horror de sus demandas
codiciosas
sobre su devastado cuerpo solamente par a no estar solo nunca
más.
Pero:
¿Qué le costaría ese olvido? Sin duda, habría un precio.
Le
preguntaría a Jaejoong, tan pronto como estuvieran solos de
nuevo. Echó un vistazo al reloj. En veinte minutos interminables.
—Jaejoong
Él
se enderezó bruscamente de donde había estado apoyado en la puerta
del laboratorio
cerrada,
tratando de no perder la compostura.
—¿Sí,
Junsu?
Se
acercó a él con el ceño fruncido, viéndose formidable
en sus pantalones vaqueros negros y una camiseta.
—Estás
pisando terreno peligroso, ¿lo sabes?
—Una
fina capa de hielo, quizás —confesó Jaejoong. Lo habría dejado
en eso, pero su mirada le decía que no era suficiente para
satisfacerle—. No te preocupes, Su, no estará aquí lo bastante
como para que fracase.
—No
entiendo qué estás esperando. Ahora está en forma y su
mente entera.
—Sus
cejas se levantaron—. ¿No será...?
—Sí,
sí. Su mente está muy bien. Está traumatizado, pero eso era de
esperar. Lo único que
necesita
es recuperar algo de peso antes de prescindir de él.
—No
estoy seguro de si vale la pena el riesgo de que esperes.
—Vale
para mí. Una vez que le borre la memoria del pasado año,
el recuerdo de su apariencia no corresponderá con lo que
verá en el espejo. Podría arreglarlo, pero esto dejaría al
descubierto errores en la continuidad, lo que sólo le causaría
más tensión.
Se
conmovió y se encogió de hombros.
—Le
di medio litro de mi sangre. Estará totalmente recuperado
en unos días y haré las gestiones para que trabaje para
Yoochun.
El
arcángel que supervisaba Norteamérica sin duda tendría un uso para
un hombre con la
formación
médica y el corazón de un guerrero como Yunho. De hecho,
podría utilizarlo para sí mismo. No había muchos
Centinelas con su profundo interés en la anatomía humana.
Junsu
se acercó a Jaejoong. Quien lo esquivó ágilmente, sabiendo
que quería obtener una lectura de su estado de ánimo.
Mientras él no tenía nada que ocultar, la confusión que
sentía hacia Yunho era demasiado personal para compartirla.
—Estoy
bien —dijo con más firmeza.
—¿Es
él, la razón por la que te sientes tan atormentado? ¿O tenías
sentimientos antes de
esto?
Miró
al hermoso rostro de su querido amigo, viendo el desconcierto
y el miedo en sus ojos azules de Serafín. Miedo por él.
Era
una de las razones por las que no había sido más
específico en su conversación con Yunho, no le contó que el
apareamiento entre ángeles y mortales fue lo que llevó a la caída
de los Vigilantes.
No
quería que Yunho temiera a la conexión que había entre
ellos, ya que actualmente, Jaejoong era la única persona de su
confianza.
Lo
leyó en su mente cuando le apretó el hombro y sabía que
comenzaba a inquietarse ante la idea de estar separado de él por
mucho tiempo. Estaba tolerando a Heechul simplemente para
evitar estar solo. Porque si estaba solo, sabía que los fantasmas
en su cabeza le ahogarían y tendría sin remedio una crisis de
pánico.
Era
sólo su fuerza de voluntad lo que hacía que Jaejoong
quisiera arrastrarse para reunirse con él. Jaejoong era un
ser que no había sido nunca menos que alguien
totalmente
sereno, hasta ahora.
—Camina
conmigo —dijo Junsu. Pasaron por el pasillo.
—¿Te
has preguntado si los mortales tienen razón acerca de las
almas gemelas? —
preguntó
Jaejoong—. Y si es así, quizás, ¿habría otra alma ahí fuera
destinada a tocar la tuya de forma que ninguna otra podría?
—¿Es
eso lo que crees que es el mortal para ti? — Junsu le dirigió una
mirada alarmante.
—No.
—Jaejoong se sobresaltó ante el malestar que estaba
sintiendo, como si su negación fuera una mentira.
—Me
pregunto si su historia, lo que le pasó y cómo lo encontré, estaba
idealmente convenido para alcanzarme y trastornarme un poco.
Desde luego, me ha
recordado
lo que está en juego y ese recordatorio vino cuando más
lo necesitaba.
¿Puede ser una
coincidencia? ¿Puede ser malo cuando definitivamente voy a
ser más diligente y prudente en el avance?
—¿Crees
que él es...? ¿Qué? ¿Algún tipo de mensaje para ti?
¿Un empujoncito en la
dirección
correcta por parte del Creador?
—Posiblemente.
—Empujó la puerta abierta a la sala —. O quizá sea una
prueba.
—¿Puedes
pasarla?
Junsu
puso un hombro dentro de la habitación después de Jaejoong.
Agarrando una caja de guantes de látex del estante, respondió:
—No
tengo otra opción. —Él se cruzó de brazos, mostrando
unos bíceps muy bien
definidos.
—Eso
no es una respuesta.
—Escucha,
Su. —Le dejó ver claramente dentro de sus ojos—.
Admiro
su capacidad de recuperación y su corazón. Me conmueve que
sea tan agradecido en vez de estar enojado y resentido. Y me
siento culpable, porque se supone que debíamos protegerlo para que
no sufriera y fallamos. Me pregunto a cuantos otros estamos
fallando en este mismo momento. Eso es todo. Esa es la conexión.
—¿Cómo
sabes que no es el precursor de una relación romántica?
—Junsu...
¿Qué significa esto?—Su mandíbula cuadrada se apretó.
—Hay
algo en esto que me inquieta. Me sentiré mejor cuando se haya ido.
—Estoy
seguro de que todos lo harán. Así que déjame seguir con su
recuperación y veremos que sucede tan pronto como sea posible.
—¿Cómo
te sentirás tú, Jaejoong? —le preguntó en voz baja. Él
suspiró y alzó la mano para poner un mechón de pelo detrás
de la oreja.
—Al
igual podríamos habernos ido un poco hacia la creación de
una restitución por lo que ha sufrido.
—Esperemos
que eso sea todo —murmuró Junsu.
LCD:
siglas del inglés liquid crystal display, en español pantalla de
cristal líquido. es una pantalla delgada y plana formada por un
número de píxeles en color o monocromos colocados delante de una
fuente de luz o reflectora.
no definitiva mente Yunho no esta bien toda vía esta traumatizado por lo que esos le hicieron y no lo pueden dejar que se valla pues Yunho necesita a Jae a su lado para sentirse bien si no por que reacciona así cuando Chul lo toco el necesita a Jae como Jae a Yunho para que los dos estén tranquilos y creo que si se convertirá esto en romance
ResponderBorrarGracias por compartirlo
yunho se ha quedado con el miedo aun y no tolera q lo toquen, solo a jae se lo permite. poco a poco se va a ir recuperando necesita tiempo. pobeshito mi osito comio rico despues de un largo año de maltrato y sufrimiento :(
ResponderBorrargracias por actualizar gabicita ^^
aayyyy por lo que leo, está hiper archi,mega, ultra prohibido que un mortal y un ángel sientan algo el uno por el otro. Junsu sospecha y por eso se siente alarmado.
ResponderBorrarqué pasaría su Jae admite sus sentimientos por Yunho?? sería relegado y degradado?? mi Dios, pobrecitos los dos, Yunho aún tiene secuelas de su encierro pero sospecho que él sentirá siempre la ausencia de Jae si los separan ,porque va más allá del trauma. él siente que Jae es sumamente importante en su vida y lo necesita con él.
gracias por este capítulo. lo esperaba con ansias.
me tiene atrapada totalmente.
Yunho todavia esta traumatizado por todo lo que le sucedió... Solo Joongie puede tocarlo... Le necesita... Al parecer, se van a complicar las cosas con los sentimientos que los dos tienen... y Junsu teme por Joongie...
ResponderBorrarMuchas Gracias por compartir este fico!!! *O*
Ay dios ay dios!! Ya enteendi cuales podrían ser las consecuencias de que los dos se enamoraran!!! Otokee!!! El Yunjae siempre anda sufriendo u.u
ResponderBorrarJunsu me amargan tus palabras :/ esperi que puedan estar juntos, si Changmin puede estar con una mortal, Jaejoongie tambien puede quedarse con su Yunnie ¡he dicho! XD gracias por el capítulo :)
ResponderBorrarMe preocupz el YunJae :s
ResponderBorrarEs dificil imaginar qe Junsu tenga esos pensamientos x3
Oh! No habia pensado en eso....si el esta con Yunho...se convertira en un Angel caido.....o no! Es imposible!? Su union es imposible? Que mal....por que Dios lo haria su otra mitad si su relacion no puede ser.......
ResponderBorrarJunsu, me cuesta admitirlo pero tiene razon...aunque claro....el no es Dios....tal vez asi deba de ser.....
Me estoy confundiendo....como sea...a leer el siguiente
No seas terco jae no te resistas xD
ResponderBorrarQue no lo abandone!! Y cual sera el precio a pagar si le borran los recuerdos a yunho?
A leer el siguiente