martes, 10 de marzo de 2015

Subasta De Esclavos (Adaptación) Capítulo 6



Capítulo 6


Jaejoong estiró el cuello de nuevo, girando la cabeza primero hacia la izquierda y luego hacia la derecha, intentando ver mejor el tatuaje que lucía ahí. No mentía cuando le dijo a Yunho que era precioso. Lo era. También era muy raro verlo en su propia piel.

"Te queda muy sexy," Yunho ronroneaba de satisfacción.

Jaejoong miró el reflejo de Yunho en el espejo. Vaya, sí que era grande. De pie, la cabeza de Jaejoong apenas alcanzaba los pezones de Yunho. Sus ojos se posaron en el tatuaje en su brazo y no pudo evitar sonreír, satisfecho.

A una parte posesiva y perversa de Jaejoong le gustaba ver su marca mostrada tan descaradamente en el cuerpo de Yunho donde todo el mundo lo vería y sabría que el hombre le pertenecía. De dónde venía esa sensación, considerando sus circunstancias, Jaejoong no tenía ni idea.

"Tengo una sorpresa para ti," dijo Yunho mientras se acercaba para sentarse en la cama.

Jaejoong miró por encima de su hombro con curiosidad. "¿Oh?"

Yunho pareció mirarle con atención antes de contestarle. "Sabes que ahora eres mío, pase lo que pase, ¿verdad?"
Jaejoong frunció el ceño. Su corazón de repente empezó a latir más rápido debido al miedo. ¿Qué significaba esto? "Dijiste que no me ibas a vender."

"No, no," Yunho se puso de pie y cruzó rápidamente la habitación para abrazar a Jaejoong. "No tengo ninguna intención de renunciar a ti. Me perteneces ahora y para
siempre."

"¿Entonces a qué te refieres?" Jaejoong no pudo sino evitar inclinarse hacia la mano que se curvó sobre su mejilla para tranquilizarle. Sonrió un poco cuando se dio cuenta de que la mano cubría todo el lado de su cara.

"Sé que todo esto ha sido muy duro para ti

"¿Esto?"

"Que te secuestrasen de tu casa, que te llevasen a un sitio que nunca habías visto, que te vendiesen como esclavo y convertirte en compañero de un alienígena."

La esquina de los labios de Jaejoong se torcieron hacia arriba. "No todo ha sido malo."

"¿Sí?" 
 
El aliento de Yunho era ardiente contra el cuello de Jaejoong cuando echo la cabeza hacia atrás. Escalofríos recorrían su espalda, pero era de placer. Jaejoong gimió cuando dulces besos se posaban en su piel. No estaba seguro de si alguna vez se acostumbraría a cómo Yunho le anhelaba.

"¿Es esta tu sorpresa?" susurró Jaejoong.

"No." Yunho rió. "Esto es porque al parecer no puedo quitarte las manos de encima."

"Lo dices como si fuera algo malo."

"Te voy a llevar a casa para--"

"¿Me llevas a casa? ¿Por qué? ¿Que hice mal?" No pudo ocultar la ansiedad en su voz y rostro. Mirando a Yunho se le helaba la sangre al imaginar que este lo llevase de vuelta a la Tierra y abandonándole a la solitaria existencia que había tenido ahí.

"Te llevo a casa para que puedas recoger tus cosas, Jaejoong. Quiero que tengas algo tuyo para que te sientas más a gusto en tu nueva vida." Yunho agarró la barbilla de Jaejoong con fuerza, sus ojos serios. "Pero escúchame bien, mascota. No te quedarás. Me perteneces y vas a dónde yo vaya, ¿entendido?"

Jaejoong rápidamente asintió con la cabeza. No protestó cuando Yunho le abrazó con fuerza. Simplemente escondió su cara en el cuello de Yunho. Sentía como si estuviera perdiendo la cabeza. Había perdido el rumbo completamente.

Ahora era un esclavo, una mascota, algo que debería odiar con todas sus fuerzas. Y sin embargo, la sola idea de volver a casa y no ver nunca más a Yunho le llenaba de terror y pánico hasta el punto de casi desmayarse. Las manos de Jaejoong estaban sudorosas, le faltaba el aire y su pecho dolía dónde se encontraba su corazón. Cuanto más lo sujetaba Yunho, cuanto más le decía que se quedaba con él, tanto mejor se sentía Jaejoong. Y si eso no confundía a Jaejoong todo lo posible, no sabía que podría.

"Tengo un gato," dijo Jaejoong en voz queda mientras frotaba su mejilla contra el pecho de Yunho. "¿Puedo traerme a mi gato?"

"Preferiría hablar con Doc antes de darte permiso, Jaejoong." Yunho acarició la parte de atrás de la cabeza de Jaejoong. Era una caricia relajante y Jaejoong suponía que el
hombre podía sentir su nerviosismo. "Quiero asegurarme de que tu gato puede viajar por el espacio antes de decirte que sí. No quisiera que le pasara nada malo."

"Claro, por supuesto." Jaejoong asintió con la cabeza. No había pensado en eso. Se quedaría hecho polvo si le pasara algo a su mejor amigo y confidente. Jiji había estado con él durante la salud y la enfermedad. "¿De verdad puedo traerme mis cosas?"

"Jaejoong, no quiero que seas infeliz conmigo," dijo Yunho. "Esto no es un castigo. Si tener tus cosas, cosas quete son familiares, hace que te sientas más a gusto, es mi deber como tu amo asegurarme de que las tengas." 
 
"¿Pero?" Jaejoong sabía que había un pero por ahí en alguna parte.
"Antes de que aterricemos quero que tengas muy claro que no nos vamos a quedar. Quiero tu promesa de que nos marcharemos cuando yo lo diga, sin discusiones." La cara de Yunho se tornó seria. "Si no puedes darme esa promesa, no te dejaré bajarte de la nave cuando aterricemos."

Jaejoong abrió la boca para empezar a contestar cuando de repente una idea terrorífica pasó por su mente. Se sentó rápidamente y miró a su amo. "Yunho, ¿y si alguien te ve?" Jaejoong no creía que Yunho pudiese pasar desapercibido entre una multitud. Aparte de ser enorme, tenía orejas puntiagudas, colmillos y una cola. No había manera en que pudiese pasar camuflado.

"Esperaremos que eso no pase."

"¿Esperar?" Jaejoong gritó. "Yunho, no podemos hacer que pases desapercibido. Tienes orejas puntiagudas y una cola. No creo que podamos esconder eso."

Yunho se rió por lo bajo. "Te sorprenderías, mascota. Llevamos siglos visitando la Tierra. Y no nos han pillado aún."

"¿Y Roswell?"

"¿Roswell?"

"Junio 1947, una nave alienígena se estrelló cerca de Roswell, Nuevo México," dijo Jaejoong. "Encontraron cadáveres extraterrestres, alienígenas y tecnología avanzada de la que se aprovecharon las fuerzas aéreas. Es de dónde vienen los hornos microondas, ¿sabes?"

"Jaejoong, los efectos de calefacción de las microondas fueron descubiertas por un ingeniero norteamericano llamado Percy Spencer en 1945, cuando estaba construyendo magnetrones para radares. No se llevó a la Tierra por extraterrestres."

"Dices tú." Jaejoong cruzó los brazos sobre el pecho y miró desafiante a Yunho. Jaejoong de repente se encontró estrujado contra el pecho de Yunho mientras este reía.
Entornó los ojos y se apoyó de nuevo contra ese pecho.

"No te preocupes, mascota. Tenemos maneras de escondernos de la vista de los humanos."

Jaejoong frunció el ceño, sus labios haciendo un mohín. "Es que no quiero que te pasa nada." Tiró de un hilo en su traje. No entendía los sentimientos que tenía por el
hombre que le había comprador, tomado y marcado. Iba en contra de todo en lo que creía. Y sin embargo, Jaejoong no podía negar que los tenía. La sola idea de que algo le pasara a Yunho le revolvía el estómago. La idea de no ver nunca más a Yunho le hacía sentirse enfermo.

"Yunho, quizás no deberíamos ir," susurró Jaejoong.
"Me gustan mis cosas, pero no creo que valga la pena si vas a ser descubierto. Si te pasara algo, yo . . ." Jaejoong sacudió la cabeza mientras imaginaba el peor de los casos.
"He oído lo que hace nuestro gobierno a los alienígenas, y no es nada bueno. Experimentarían contigo y . . . y . . ."

Jaejoong no estaba preparado cuando Yunho le dejó en la cama. Miró hacia arriba, preguntándose si había dicho demasiado. No tenía ni idea de cómo funcionaba una relación amo/mascota. Ni idea de cómo reaccionaría Yunho a sus sentimientos. Jaejoong no tenía ni idea de si se le permitía tener sentimientos hacia Yunho, solo era una mascota, al fin y al cabo.

Miró como Yunho cruzaba la habitación y abría un pequeño panel en la pared, sacando un pequeño aparato negro que parecía una pulsera grande. Yunho cerró el panel
y volvió a la cama. Se puso el aparato en la muñeca y apretó unos pocos botones. El aire alrededor de Yunho resplandeció y se desenfocó durante un momento.

Jaejoong siseó y se alejó del extraño que de repente se apareció ante él, un extraño que era humano. Lo único que era igual era el tamaño del cuerpo de Yunho y el tono moreno de su piel. Todo lo demás se había ido, las garras, los colmillos, las orejas puntiagudas, incluso la cola. Todo se había ido.

"¿Yu-- Yunho?"

"Soy yo, mascota."

Bueno, por lo menos la voz era igual. Jaejoong gateó despacio hasta que estaba arrodillado en la cama frente al hombre. Dudó y luego alcanzó la mano para tocar a Yunho.

El hombre sentía igual. Jaejoong podía incluso sentir la misma piel suave y lampiña bajo los dedos. Yunho simplemente se veía diferente, muy diferente.

"¿Cómo . . .?"

"Se llama un aparato de desplazamiento animado, o ADA," Yunho apretó de nuevo unos cuantos botones en la pulsera. El aire titiló de nuevo y cuando se asentó era Yunho
de nuevo. "Solo se puede usar durante periodos cortos de tiempo, pero nos dejará entrar en tu casa y salir de nuevo, por lo menos."

Jaejoong se rió, y luego se cubrió la boca con la mano al darse cuenta de que su risa tenía cierto tono histérico. Amos y esclavos, alienígenas, el espacio exterior y aparatos de desplazamiento animado. Jaejoong estaba volviéndose loco.

Yunho parecía notar la ansiedad de Jaejoong. Se quitó el pequeño aparato y lo volvió a guardar antes de sentarse en la cama con Jaejoong. Se sentó pacientemente, esperando,
sin decir palabra.

"Todo esto es muy confuso, Yunho," susurró Jaejoong y agarró la mano de Yunho para confortarse.

"Lo sé, mascota, y espero que se mejore con el tiempo." Yunho apretó la mano de Jaejoong. "Solo recuerda que no estás solo, mascota. Somos compañeros, ¿recuerdas? Estamos juntos para siempre." 
 
Las palabras de Yunho llenaron a Jaejoong de esperanza y una sensación de pertenecer que no recordaba haber sentido jamás, ni siquiera en la Tierra. Jaejoong había
tenido novios en la Tierra. Había tenido citas y rollos de una noche. Hasta había vivido con un chico durante algunos meses.

Jaejoong nunca se había sentido realmente deseado antes de Yunho. Sintió una imperiosa necesidad de demostrarle a Yunho cuán importante era para él, aunque tenía miedo de decirlo. Se giró y cayó de rodillas entre las piernas de Yunho, alzando la mano hacia el botón de arriba del traje de Yunho. Una mano alrededor de su muñeca lo detuvo. Jaejoong miró hacia arriba, preocupado por si se había cruzado alguna línea. Era difícil no hacerlo. No sabía dónde estaban.

"¿Qué haces, mascota?"

Jaejoong sonrió descaradamente y se soltó de la mano de Yunho. Fue a por el botón de nuevo, y luego a por la cremallera hasta que el traje cayó hasta la cintura de Yunho.

Un pequeño tirón al material elástico y la polla rígida de Yunho estaba libre. Jaejoong acercó la cara hasta el glande y miró coqueto a Yunho mientras lamía una pequeña gota de pre-eyaculación.

"Jaejoong," Yunho gimió. Jaejoong tragó cuanto pudo de la verga de Yunho. Podía sentir como Yunho le agarraba el pelo, enredándolo en sus dedos mientras el hombre
temblaba. "Mierda, Jaejoong, tu boca . . . ¡Dios!"

Jaejoong lamió por la dura verga y chupó el glande para probar la esencia de su compañero. Subió y bajó por la polla de Yunho, dejando que la cabeza rozara su garganta y
luego subiendo para chupar y lamer la cabeza. Podía sentir a Yunho hincharse y endurecerse en su boca. La polla de Yunho creció tanto que la mandíbula de Jaejoong empezó a doler. Empezó a cabecear más rápido, sin saber si iba a poder aguantar mucho más. Movió la mano hacia abajo y pasó un dedo por las pelotas de Yunho. El pequeño y suave saco se contrajo hacia el cuerpo de Yunho instantáneamente.

Yunho se corrió con fuerza, gritando y Jaejoong tragó ávidamente, saboreando el sabor dulce y afrutado de la semilla de su amante. Continuó lamiendo y chupando, negándose a soltar la polla de su boca hasta que Yunho se ablandeció.

Lamiéndose los labios, Jaejoong miró hacia arriba y vio como Yunho le miraba. Sus ojos dorados estaban llenos de calor y afecto. La sangre de Jaejoong ardió de deseo. Yunho
parecía saciado, feliz. Jaejoong fue felizmente al abrazo que Yunho le ofrecía.

"Gracias, mascota," dijo Yunho con voz más suave que su voz normal, más oscura y áspera. Jaejoong empezó a levantar la cabeza para preguntar si Yunho estaba bien, pero
el alienígena colocó la cabeza de Jaejoong contra su pecho.

"Duerme, mascota. Pronto llegaremos a tu planeta y necesitas descansar."

La polla de Jaejoong estaba dura, pero curiosamente, no sentía la necesidad de correrse. La mamada que le había hecho a Yunho le había dejado más satisfecho que ningún
polvo que hubiera tenido con otra persona hasta entonces. Estaba duro, pero satisfecho.
Jaejoong se acurrucó contra el cuerpo de Yunho y se relajó. Podía sentir como el calor le envolvía mientras el hombre acariciaba suavemente su pelo. Yunho empezó a ronronear y Jaejoong dejó que el suave sonido reconfortante le adormeciese.


* * * *


Jaejoong se despertó solo, y no le gustaba.

Había pasado la noche con el cuerpo de Yunho envolviendo al suyo y sin Yunho ahí, tenía frío. Rodó y miró la habitación, decepcionado al encontrarlo vacío. Colgándose de un lado de la cama, Jaejoong buscó el traje que le había dado Yunho antes. En vez de eso, encontró uno nuevo, doblado en la silla. Sonrió ante el detalle de Yunho y lo agarró. Intentó recordar como había hecho Yunho que la prenda encogiera y presionó cautelosamente el botón.




Este era en dos tonos de azul, y se ajustaba como una segunda piel igual que el otro. Jaejoong rió mientras se miraba, girando para ambos lados. Sacudió la cabeza, sorprendido ante lo bien que le quedaba el culo dentro del traje. Estaba bueno. Esperaba que Yunho opinase lo mismo.

Jaejoong sonrió y se dirigió a la puerta. Quería encontrar a Yunho, y después comer algo. Jaejoong se moría de hambre. Esta vez recordó cómo funcionaba el panel y la puerta se abrió de inmediato. Jaejoong salió de la habitación y se concentró en recordar cómo se iba al comedor. Se rió cuando se dio cuenta de que había estado algo distraído la última vez, así que probaría suerte. Supuso que podía preguntar por Yunho si se perdía.

Tras perderse un par de veces, Jaejoong finalmente encontró el comedor. Podía oír ruido incluso antes de abrir la puerta. Los pasos de Jaejoong se detuvieron cuando miró
hacia adentro. La habitación parecía estar llena, pero en realidad solo había unas pocas personas. Es que todos eran tan grandes.

Buscando por la habitación, el corazón de Jaejoong casi se paró cuando vio a su compañero de piel y pelo oscuros sentado en una de las mesas. Solo tenía ojos para el
hombre guapísimo mientras cruzaba la sala, aunque podía sentir varias miradas seguirle. Cuando llegó hasta Yunho, el comedor estaba en silencio. Jaejoong se plantó al lado de
Yunho y miro a su alrededor con aprehensión. Se dio cuenta de repente de que él y Yunho eran el centro de atención.

Jaejoong empezó a temblar de aprehensión. No sabía que se esperaba de él en público como la mascota de Yunho y no quería avergonzar ni enfadar al hombre. La decisión le fue arrebatada cuando un brazo le rodeó y tiró de él hasta que estaba sentado en el regazo de Yunho.

Jaejoong se acurrucó contra su compañero, agarrando la parte de delante de su traje mientras sentía como una mejilla se frotaba contra su cabeza. Cuando empezó el ronroneo, Jaejoong se relajó de inmediato. Respiró hondo. No entendía como el ronroneo de Yunho le hacía sentirse más seguro, pero eso no iba a evitarle disfrutar de ello.

"¿Has dormido bien, mascota?"

Jaejoong asintió con la cabeza.

"¿Tienes hambre?"

Jaejoong asintió de nuevo. No quería levantar la cabeza y darse cuenta de la gente que había alrededor de ellos. Preferiría quedarse rodeado por los brazos de Yunho, perfectamente feliz ahí. La mano que levantaba su barbilla no se lo iba a permitir. Jaejoong miró a los ojos color dorado de Yunho.

"Eché de menos esta preciosa cara." 
 
Jaejoong arqueó una ceja. "No la habrías echado de menos si te hubieras quedado en la cama conmigo."

Jaejoong supo que no solo Yunho le había oído cuando oyó una risita desde el otro lado de la mesa. Jaejoong podía sentir como su cara ardía y se giró para ver al hombre sentado al otro lado. Jaejoong reconoció al hombre, era el que Yunho había llamado Yoochun.

Era alto, pero no tanto como Yunho. Su piel no era tan bronceada como la de Yunho, pero de un moreno claro. Sí tenía las orejas puntiagudas, garras y cola.

Eso y los ojos dorados de Yunho parecían ser lo único que tenían en común. Los ojos de Yunho son más bonitos, pensó Jaejoong lealmente.

"Mascota, este es Park Yoochun, mi segundo al mando," dijo Yunho.

"Normalmente le llamamos Chun. Chun, este es Jaejoong, mi compañero."

Jaejoong saludó a Yoochun. Ignoró la ceja levantada y la pequeña sonrisita del hombre. "Tú eres el que intentó detener a Yunho antes." Jaejoong se rió. "Eso fue realmente estúpido. Yunho estaba a punto de arrancarte los brazos y azotarte con ellos."

La expresión de autosuficiencia fue reemplazada por una mueca. "Sí, bueno . . ."
"Se bueno, mascota," le riñó Yunho con una sonrisa.

"Es su trabajo asegurarse de que todos los de la nave están a salvo. Y está al mando cuando yo no estoy."

A Jaejoong no le gustaba como sonaba eso. "¿Significa que está al mando para mí también?"

"Solo en lo referente a tu seguridad."

"Y sigo pensando que ir a la Tierra no es seguro,"

Yoochun frunció el ceño.

Jaejoong se tensó cuando sintió a Yunho hacer lo mismo. Miró al hombre, escudado por su pelo. La mandíbula de Yunho estaba tensa y no parecía feliz.

"Piensa cómo te sentirías si alguien te raptase mientras dormías, te llevase y te vendiese como esclavo en la Tierra, un mundo del que no sabes nada. No tienes ninguna de tus cosas, nada que te resulte familiar, y hay una criatura alienígena diciéndote que ahora eres su esclavo."

El puño de Yunho golpeó la mesa. "¿Te sentirías mejor si te permitiesen tener algunos de tus pertenencias contigo?"

A Jaejoong le asombró saber lo bien que Yunho sabía sobre cómo se sentía y que luego defendiese esos sentimientos ante un amigo. Se acurrucó contra Yunho y le susurró al oído. "Me ha acabado gustando esta criatura alienígena," le canturreó. El brazo de Yunho le rodeó la cintura. Y le dejó un pequeño beso en un lado de su cabeza. 
 
"A mí me gusta el esclavo también," susurró Yunho antes de mirar a Yoochun de nuevo. "Sé que no te gusta. NO tiene por qué. Solo tienes que asegurarte de que aterricemos cerca de la casa de Jaejoong y de que no nos detecte un radar de la Tierra."

"Bueno. Pero sigue sin gustarme." Yoochun sacudió la cabeza y señaló a Yunho con un dedo. "Antes de que apareciera tu pequeña mascota, no se te habría ocurrido hacer algo así. Tener una mascota te ha hecho perder el poco juicio que tenías."

Yunho empezó a abrir la boca. Jaejoong sabía que su compañero iba a discutir, podía sentir como los músculos de Yunho se tensaban debajo de él. Levantó la mano y colocó su
dedo sobre los labios de Yunho, recibiendo una ceja arqueada en respuesta. Jaejoong simplemente sonrió y miró a Yoochun, travieso.

"¿Estás diciendo que no te gustaría tu propia mascota humana?"

"Me gustaría un humano como mascota, pero no dejaría que afectara las decisiones que tomase, ni que me hiciera cambiar de opinión."

"¿De verdad?" preguntó Jaejoong, incrédulo. "Cuando lleguemos a la Tierra, recuérdame que te presente a un amigo mío. Te hará cambiar de opinión."
"Jaejoong, no puedes decirle a nadie que estamos ahí," dijo Yunho rápidamente. "Si alguien nos descubre . . ."

Jaejoong dio palmaditas en el brazo de Yunho. "No te preocupes, Yunho, Junsu no dirá nada si yo se lo pido."

"¿Junsu?"

"Junsu era, es, mi mejor amigo, aparte de Jiji. Él--

"¿Jiji?"

"Mi gato, Jiji Houdini." Jaejoong rió.

"¿Jiji Houdini?" Yunho frunció el ceño, el nombre le era familiar. "¿Ese no era un mago famoso por ser además escapista?"

"Sí, por eso llamé a mi gato así," dijo Jaejoong. "Puede escaparse de donde sea. Jiji podría escapar de una habitación esférica sin ventanas ni puertas."

"¿Cómo?" Yoochun posó las manos sobre la mesa y se inclinó hacia Jaejoong, muy interesado en la explicación. "Eso no tiene ningún sentido. ¿Cómo puede alguien escapar de una habitación esférica sin ventanas ni puertas? ¿Puede desaparecer o hacerse intangible?"




Jaejoong parpadeó. ¿Este tipo iba en serio? "Um . . . solo es una manera de hablar. Jiji simplemente es muy bueno escapándose."

Yunho se rió y abrazó de nuevo a Jaejoong. "Acaba de contarnos sobre tu amigo, Junsu."

"Ah. Sí vale. Bueno como iba diciendo, Junsu es mi mejor amigo junto con Jiji. Haría lo que fuera por mí y yo por él. Odio tener que abandonarle." Jaejoong miró hacia abajo y tiró del material de su traje. "Soy todo lo que tiene. Siempre hemos sido nosotros dos, y Jiji. No sé qué va a hacer sin mí."

Se le ocurrió una idea a Jaejoong cuando pensó en Junsu solo sin él. Miró a Yunho. "¿Puedes tener dos mascotas?"

"Jaejoong--"

"¿Por favor?"

"Mascota, no es tan fácil," dijo Yunho.

"Seremos buenos, lo prometo," dijo Jaejoong rápidamente, y agarró el traje de Yunho. "Nunca tendrás que castigarnos. Haremos todo lo que digas."

"Jaejoong, para, ya basta." Yunho agarró las manos de Jaejoong y las apretó con las suyas. "En otras circunstancias podría tener dos mascotas. Podría tener cien si quisiera. Pero no son circunstancias normales.. Eres más que mi mascota. Eres mi compañero. Eso significa que solo tú."

Aunque las palabras de Yunho le hacían derretirse por dentro a Jaejoong, también le llenaban de tristeza. Dejó caer su cabeza sobre el pecho de Yunho e intentó que no se
le escaparan las lágrimas. Ya echaba de menos a Junsu y solo habían pasado un par de semanas. No sabía lo que iba a hacer si no veía nunca más al hombre.

"Yo me lo quedo."

Jaejoong se quedó boquiabierto y miró fijamente a Yoochun. Fingió que no había oído lo que creía haber oído. Yoochun no tenía ninguna razón para quedarse con Junsu como mascota.

"¿Por qué?"

Yoochun se encogió de hombros. "Una mascota humana es tan buena como otra, supongo."

"No, creo que no."

"¿Por qué no?" preguntó Yoochun. "Quieres que tu amigo venga contigo, ¿no?"

"Quiero que Junsu venga, pero no creo que seas lo bastante bueno para él."

"¿Por qué no?" Yoochun parecía realmente interesado en la respuesta de Jaejoong. También parecía completamente ignorante a la manera insensible en que había hablado
sobre Junsu, como si fuera un simple producto de compraventa.

Jaejoong de repente se dio cuenta de la enorme diferencia que había entre Yunho y Yoochun, la principal era cómo pensaban. Jaejoong sabía que para el resto del mundo
siempre sería la mascota de Yunho, pero el hombre le trataba como su compañero. Yoochun solo le veía como mascota. 
 
"Solo nos ves a Junsu y a mí como una mercancía, ¿verdad?" Jaejoong preguntó al mirar a Yoochun fijamente. Quería ver todas las reacciones que tenía el hombre ante sus
palabras.

"Eres una mascota."

"Y esa es exactamente la razón por la que no quiero que te quedes con Junsu." Yoochun parecía confuso, como si de verdad no entendía lo que Jaejoong quería decir.

"Somos seres vivos, Yoochun. Tenemos sentimientos, necesidades y deseos.

No somos diferentes que tú o Yunho."

"Solo eres humano." dijo Yoochun.

"Y tú no lo eres." dijo enfadado JaeJoong.

14 comentarios:

  1. Muchas gracias amigaaaa me encanto me la pase leyendo todos los capas **

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  2. eso es que jae defienda a su amigo junsu toda vía no se lo han llevado y ya esta peleando por el para que lo trate bien y no como una mascota
    así es que si yoochun quiere quedarse con junsu tiene que portarse bien y tratarlo mejor
    yunho se puso celoso de jiji y junsu por que jae los quiere con el en la nave ojala y si pueda llevar a su gato
    gracias por el capitulo

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  3. Wiii Gracias por actualizar tan rapido como el rallo hihihihi esta muy bien asi, asi no me pierdo <3 <3 <3 <3

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  4. adoro cuando yunho ronronia y tranquiliza a jae y que bueno jae quiera que junsu este con el y como lo de fiende de yoochun muchas gracias por el capitulo besos

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  5. mi Dios, aquí se formó otra pareja, el Yoosu, Chum se llevará una grata sorpresa cuando conozca a Junsu...quiero ver eso...
    y el Yunjae tan enamorados ya están... y son tan tiernos y cariñosos, y me mata cuando Yunho le ronronea de placer a su Jae. oh my god!!!!

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  6. Educate Yoochun, si quieres a Junsu lo tendrás que tratar como persona igual a tí y no como simple mascota, si no Jae no te lo presenta.
    Es adorable Jae, muy sensible.
    Gracias por actualizar.

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  7. Vaya!! Parece que la catástrofe que me esperaba era Junsu xD así que duro contra el Chun carambas!! -he ahí por que no me gusta el YooSu- siempre me trata mal a mi Susu y ni siquiera lo conoce todavía. Ya quiero ver su cara cuando lo haga!!

    Me agarré leyendo como si no hubiera mañana y ahora necesito más plis!! \(*^*)/

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  8. a ver que pasa cuando lleguen a casa de jae! pobre susu el susto q se va a llevar por que JJ no quiere ser secuestrado solito xDD Chun espero q cuando lo vea se trague sus palabras e_e

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  9. Ya vas a retractarte de tus palabras Chunnie cuando conozcas a Junsu :3 y vas a tener que pensar diferente y no verlo como una simple mascota para que Joongie te lo presente... kyaaaa Ya se formo otra parejita (? Aunque Junsu ni enterado de nada aun xD y el Yunjae siguen en su mundo de corazones y ronroneos :3 Me encanta! Ya quiero ver lo que sucede cuando lleguen en la casa de Jae...
    Voy a seguir leyendo :D

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  10. Ohh~~ Jae nunca imágene que quisieras compartir a Yunho con Junsu xD jajaja
    pobre Junsu el no tiene idea de que están planeando para el y sin su consentimiento *0*

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  11. Santo niño de atocha yoousu a la vista...jijijiji

    Me encanto...gracias por el capitulo.

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  12. Me encanta cuando Jaejoong saca su carácter jejeje pero que convierta a Junsu tambien fue como que Jaejoong sabes lo que dices enserio quieres compartirlo lo dudo pero no te preocupes yo creo que Yoochun lo va a tratar igual ..

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  13. Aparecera junsu!! Ya hara cambiara la opinion que tiene yoochun sobre los humanos.... Sigo sin creerme que todo este tan calmado, pero bueno asi no sufren innecesariamente
    Nos leemos

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  14. Aparecera junsu!! Ya hara cambiara la opinion que tiene yoochun sobre los humanos.... Sigo sin creerme que todo este tan calmado, pero bueno asi no sufren innecesariamente
    Nos leemos

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